Tomado el fortín barcelonista

Más de dieciséis meses y 31 partidos después, el Caja Laboral eligió un buen momento para acabar con la racha de victorias en el Palau Blaugrana del Regal Barça, al que ganó por 58-63 con lo que los vitorianos ahora tienen el factor cancha a su favor en esta final de la Liga.

Los de Dusko Ivanovic cimentaron su triunfo, el primero de la final, en un gran cuarto final, en el que dejaron a los azulgrana con sólo 10 puntos anotados, y salvaron una complicada situación, puesto que remontaron siete puntos para encarar el cuarto final en igualdad.

En cuanto apareció en la recta final Fernando San Emeterio para ayudar en ataque a Thiago Splitter, los baskonistas se hicieron con el control de la situación, ante un errático Barça, lejos de su mejor forma y en el que sólo estuvieron a la altura de las circunstancias Juan Carlos Navarro y Boniface N'Dong.

La ventaja del equipo de Ivanovic alcanzó una máxima de catorce puntos (4-18), a 3:26 para el final del primer cuarto. La reacción del Barça llegó desde el perímetro. Desaparecidos Ricky Rubio y Navarro, los azulgrana empezaron a recortar desde la línea de triples.

Con un juego rápido en transición, con más control del rebote, mayor agresividad defensiva y más acierto en el tiro, los azulgrana lograron resituarse en el partido con un parcial 10-0, con intervención especial de Navarro y Ndong, que dejó el tanteador igualado en el ecuador del partido (32-34).

Un triple de Navarro dio la primera ventaja para el Barça en todo el partido (37-36) y a partir de entonces, el mando de la situación fue para los de Pascual.

Nueve puntos seguidos

La única referencia en ataque del Caja Laboral, Splitter, notaba el paso de los minutos sin recambio y, castigado, por la defensa de Lorbek, Ndong y Fran Vázquez fue bajando poco a poco sus prestaciones.

A 1:40 para el final del tercer cuarto (48-41), el Barcelona parecía tener encarrilada la situación, pero no fue así. El Caja Laboral encadenó nueve puntos seguidos y volvió a mandar (48-50), a 7:30 para el final del partido.

Confió nuevamente el Barça en la potencia de su juego interior, en la profundidad de su plantilla, en su juego exterior, pero la inercia del partido parecía decantada a favor del Caja Laboral.

Los vitorianos tuvieron un final feliz con un gran Marcelinho Huertas que llevó a los suyos al triunfo por 58-63. Una victoria que pone fin a una trayectoria inmaculada del Barcelona en la Liga ACB en su cancha, donde no perdía desde el 3 de enero de 2009, cuando los vitorianos ganaron en un partido de Liga Regular.

Los de Dusko Ivanovic han elegido un buen momento para llevarse la victoria. Ahora tienen la posibilidad de decidir el campeonato en su pista.