Al-Thani, el último foráneo en llegar a España

Todos los indicios apuntan a una experiencia distinta a las vividas anteriormente en España. Ya no sólo por la procedencia del capital, de una fortuna árabe, con lo que esto implica en cuanto a una diferente cultura a la hora de gestionar un club. El aficionado tiene motivos para creer que el jeque Abdullah ben Nasser Al-Thani no jugará con las ilusiones de los malaguistas. Que todo puede ser un proyecto serio, con propósito de que la entidad de La Rosaleda mejore sus estructuras de forma paulatina hasta llevar al equipo a metas mayores en la máxima categoría. Por otros derroteros de los conocidos en décadas de continuos sinsabores. Ahora sólo queda esperar a la confirmación del acuerdo y que el nuevo proyecto sea dirigido con inteligencia por las personas más capacitadas en cada ámbito de actuación. Porque el dinero mal derrochado no conduce a ningún éxito deportivo.