Pau Gasol y Kobe Bryant se exhiben y dan el primer golpe en la final ante los Celtics
MADRID. Actualizado: GuardarCon la pareja Pau Gasol-Kobe Bryant a pleno rendimiento, los Lakers dieron el primer golpe en la gran final de la NBA al vapulear a los Celtics (102-89) y reforzar su confianza para vengarse del anillo perdido hace dos años ante el equipo de Boston, el más laureado en la historia de la Liga norteamericana. Con una exhibición de Pau Gasol, autor de 23 puntos y 14 rebotes, también del imparable Bryant (30 puntos), y una defensa contundente, los Lakers disiparon muchas dudas y abrieron a lo grande el camino hacia su segundo título consecutivo.
El primer partido era clave para calibrar las posibilidades de los finalistas y Los Ángeles Lakers quisieron demostrar que están preparados para revalidar su corona y que no sólo disponen de quien es el jugador más determinante del campeonato (Kobe), sino también del pívot más en forma (Pau), quien en su reencuentro con Kevin Garnett sólo permitió a la estrella de los Lakers anotar 16 puntos y capturar cuatro rebotes.
No deja de aprender
El internacional español acertó más de la mitad de sus tiros (ocho de 14 en tiros de campo y siete de diez en tiros libres), puso tres tapones, cogió seis rebotes defensivos y ocho ofensivos, dio tres asistencias en 46 minutos y medio -más desgaste aún para quien más jugó y precisa descansar durante el Mundial- y dejó en evidencia a Garnett y Kendrick Perkins. Pau Gasol, que no deja de aprender y sacrificarse en defensa, representó como nadie el poderío interior de un equipo que sumó once rebotes más que los Celtics (42 frente a 31).