Mueren cuatro personas al estallar una fábrica de pirotecnia en Sevilla
Dos de los trabajadores salieron despedidos de la nave situada en Benacazón, mientras otro pudo salvarse pero está muy grave
SEVILLA.Actualizado:Benacazón, un pueblo del Aljarafe sevillano de 6.500 habitantes, vivió ayer una de los días más trágicos de su historia reciente. Cuatro de sus vecinos murieron al estallar la fábrica de pirotecnia en la que trabajaban, mientras que otra persona, que al parecer visitaba la nave, se encuentra gravemente herida, con quemaduras prácticamente en casi todo su cuerpo. Los operarios preparaban fuegos de artificio para las ferias que se avecinan en los pueblos colindantes.
El suceso ocurrió a las 13 horas por causas que aún investiga la Guardia Civil. La fábrica, en la que uno de sus propietarios está entre los fallecidos, quedó totalmente destruida. La deflagración fue de tal calibre que dos de los trabajadores salieron despedidos por el aire. Los fallecidos se encontraban en el módulo donde se confeccionan los artefactos.
La explosión conmocionó a los vecinos del pueblo pese a que la fábrica se encuentra a cinco kilómetros de la localidad. Fuentes de la Guardia Civil indicaron a este periódico que la primera llamada se recibió a las 13.03 minutos. En pocos minutos, el lugar estaba rodeado de 15 patrullas de la Guardia Civil de todos los pueblos vecinos, bomberos y sanitarios del servicio de emergencias.
Los agentes colocaron de inmediato un cordón de seguridad ya que las deflagraciones seguían produciéndose y cabía la posibilidad de otra explosión. Junto al módulo siniestrado había otro con pirotecnia.
Hasta las 14.37, una vez extinguido el fuego, no se pudo intentar el rescate de los cadáveres. Los bomberos tuvieron que desescombrar la nave para recuperar a los fallecidos y al herido. Este fue trasladado al hospital Virgen del Rocío de Sevilla, que cuenta con una unidad especializada en quemados. Su estado es crítico, según dijeron fuentes del hospital a Europa Press.
En el lugar se vivieron escenas de dolor y tensión entre los familiares de las víctimas y los vecinos y amigos. Los sanitarios desplazados tuvieron que atender a más de uno por su estado de 'shock'. Se sucedieron horas interminables de espera y de dolor. A las 16.10 fueron trasladados los cadáveres al Instituto Anatómico Forense de Sevilla, donde se procederá a su identificación con técnicas genéticas. Fuentes del Instituto Armado señalaron ayer la dificultad de esta, ya que los cuerpos están calcinados y muy deteriorados.
Investigación
Nada más apagarse el fuego, los equipos Tedax de la Guardia Civil entraron en la nave para sacar el material pirotécnico y evitar así otra tragedia. Con posterioridad el equipo de investigación de incendios del Instituto trabajó toda la tarde en la nave siniestrada a la búsqueda de indicios que aclaren las causas de la explosión.
Al lugar de los hechos se desplazaron la alcaldesa de la localidad, Juana María Carmona (PSOE) y el consejero de Empleo, Manuel Recio. La alcaldesa, visiblemente afec tada, explicó que todo el pueblo está destrozado por la tragedia, «porque los fallecidos, menores de 45 años, tienen niños pequeños», según contó a Efe.
La alcaldesa no se explicaba las causas del accidente y aseguró que la fábrica había sido remodelada recientemente, «por lo que se puede considerar nueva».
El Ayuntamiento de la pequeña localidad sevillana celebró anoche un pleno en el que se acordó por unanimidad decretar tres días de luto por las víctimas de la tragedia. Con los vecinos y familiares de estas se solidarizaron ayer toda la clase política. El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, envió su pésame a las familias, lo mismo que el líder el PP andaluz, Javier Arenas.