«Esta será la reunión definitiva»

Federico Souza apareció después de varias semanas sin dar señales de vida. El presidente del Xerez analizó la complicada actualidad azulina y confirmó que en la jornada de hoy tiene previsto solucionar los líos institucionales que amenazan al club. Ayer tenía previsto el consejero delegado reunirse con los administradores concursales, aunque no se pudo tener el encuentro «porque los administradores no tenían previsto tener este encuentro», aunque informaba que hoy «a media mañana nos vamos a reunir con los administradores y esperamos terminar de resolver el tema y empezar a trabajar en la plantilla de la temporada que viene». Y es que Souza tiene que presentar un aval por un valor aproximado de un millón de euros para, primero despedir a Antonio Fernández Monterrubio, Miguel Ángel Rondán, Antonio Poyatos y Jacobo Moreno, y segundo, facilitar el segundo año de contrato que pide Gorosito para renovar.

El mandatario argentino no dio más pistas, aunque sí que aseguró que «para bien o para mal, todo se solucionará mañana (por hoy)». Lo que sí que tiene arreglado Souza es la continuidad del técnico argentino «de palabra»: «Tenemos un acuerdo y sólo quedaría firmarlo. Ayer (por el lunes) por la tarde hablamos otra vez y hoy se lo hubiera comunicado, de haberme reunido con los administradores, pero no puede ser y está a la espera de que le diga que está arreglado el tema institucional para finiquitar su contrato. Estoy esperando a solucionar estos problemas para que él viaje a España, pueda firmar su contrato y pensemos en otras cosas para tener el futuro resuelto».

Los requisitos

Pero para que llegue Gorosito «hay una persona que tiene que salir, eso está claro». Es un «requisito» que los trabajadores del club salgan del mismo para así «poder renovar a Gorosito». Souza entiende que hay que hacerlo «lo antes posible», haciendo referencia, no sólo al despido de Fernández Monterrubio, sino de los otros empleados del club anteriormente citados: «Él había pedido unos requisitos para renovar y esperamos solucionarlo cuanto antes porque ya ha pasado demasiado tiempo».

En cuanto a las movilizaciones de la afición, Souza entiende la postura de los xerecistas, manifestando ayer que la marea azulina «hace bien manifestando lo que les preocupa. Yo me pongo en su lugar y estaría igual de intranquilo, pero son las herramientas que ellos tienen y entiendo que está bien que lo hagan. Es una actitud a valorar y comprensible».

Además, el argentino comentaba que también entiende «su desconfianza, igual que cuando les mostré que las acciones estaban a mi nombre ahora quieren que les diga cuánto pagué por ellas. Entiendo todo, pero siempre va a haber que demostrar cosas. Es así y uno sabe a lo que se expone».

Campaña de abonados

En otro orden de cosas, el consejero delegado del Xerez reconocía que la planificación de la próxima temporada va a empezar «tarde y es una oportunidad que hemos perdido. Teníamos previsto comenzar la campaña de socios nada más concluir la temporada, con la gente muy motivada e ilusionada con el equipo y el entrenador, pero el tiempo ha pasado, la gente ya está más desmotivada y es algo que ya no podemos recuperar. Hoy por hoy la actitud de la gente es otra distinta y debemos cuidar el patrimonio del club, es decir, la gente y los jugadores, y si no podemos aprovechar esa ocasión estamos perdiendo el tiempo» En definitiva, que si hubieran «arreglado el tema de los despidos, la campaña de socios sería mucho mejor».

Ya para acabar, Souza quiso analizar el cruce de declaraciones de la semana pasada entre los administradores y sus consejeros. El consejero delegado comentaba que estaba «en Argentina, teníamos un principio de acuerdo con los administradores para solucionarlo todo el lunes, pero no se pudo resolver ese día y los directivos entendieron que de esa manera no se podía seguir». Es por ello que Federico llamara a Antonio del Puerto, uno de los administradores, «y entendimos que podíamos llegar a buen término».