El último acorde de Danays

«Siento que adoro y respeto mucho la música», escribe Danays Bautista en su perfil de MySpace. En esta web, la guitarrista, compositora y cantante de origen cubano también explica que su pasión musical surgió desde la infancia, que estudió ocho años en el conservatorio y formó parte de diversas agrupaciones. Además, estaba trabajando en su primer proyecto discográfico en solitario. Pero los planes debieron cambiar -o al menos interrumpirse- este lunes, cuando la artista invidente perdió el brazo izquierdo al ser arrollada por el metro de Madrid tras caer entre dos vagones.

Tres cirugías y casi treinta horas en el quirófano no fueron suficientes para salvar la extremidad de la mujer de 37 años. Ayer por la mañana, los médicos del hospital Gregorio Marañón le amputaban el brazo de forma definitiva. Su cuerpo había rechazado el reimplante generando una obstrucción de las venas que, además, afectaba a sus pulmones. Aunque se encuentra estable dentro de la gravedad de su caso, la mantendrán sedada al menos hasta esta tarde.

«Cuando despertó de la primera cirugía y fue consciente de lo que le había pasado no podía ni siquiera hablar», recuerda una de las amigas de la artista que prefiere no revelar su nombre. Hasta el miércoles aún existía la esperanzada de que la intervención resultara exitosa y que Danays recuperase la movilidad parcial del brazo. Pero la noticia de ayer terminó con esa ilusión. «Vicky -su esposa- está destrozada. No quiere hablar con nadie y mucho menos con la prensa. Está sufriendo muchísimo», lamenta.

Dispuestos a apoyar a la artista, sus allegados organizaron anoche un concierto benéfico para poder traer a su madre desde Cuba. «Todos los que la queremos deseamos que la fortaleza y la alegría que siempre la han caracterizado le ayuden a salir adelante», dice afligida. «En cuanto se recupere, y si ella está de acuerdo, alquilaremos una sala grande para ofrecer otro concierto en su honor donde, al menos, podrá cantar».