Cae en Francia la cúpula de ETA mientras se reunía para preparar nuevos atentados

El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha asegurado que la operación de esta madrugada contra ETA, en la que se ha detenido al 'número uno' de la banda y a su lugarteniente y llamado a ser su 'sustituto', además de otras tres personas, tiene "más importancia" que la detención del que fuera máximo jefe de ETA 'Txeroki'. Además, ha calificado a Mikel Karrera de terrorista "especialmente peligroso".

El ministro ha querido dejar claro que Mikel Karrera era una persona "muy importante" de ETA en los últimos tiempos y ha explicado que los detenidos se encontraban "reunidos" en el piso de Bayona, pero no "escondidos", sino "trabajando". "Eso demuestra que ETA sigue en lo que sigue y está en lo que está", ha insistido el ministro, quien ha revelado que a los detenidos se les ha intervenido tres pistolas y material informático.

La operación, realizada por la Gendarmería en colaboración con la Guardia Civil, ha tenido lugar a las 6.15 horas de la mañana. Además de Karrera Sarobe, también ha sido detenido otro de los etarras más buscados, Arkaitz Agirregabiria del Barrio, uno de los terroristas que participaron en el asesinato de un gendarme en las afueras de París, la última víctima de ETA. La tercera detenida en la vivienda es Maite Aranalde, una etarra huida cuando se encontraba en libertad bajo fianza. En el momento del arresto, "cada uno de ellos llevaba un arma".

Una cuarta persona ha sido arrestada en otra localidad francesa. Se trata de Benoit Aramendi, un presunto colaborador que facilitó el piso a la cúpula de ETA y que se encargaba de abastecerles. Junto a él ha sido detenida su pareja, Laettitia Chevalier, de nacionalidad francesa. Benoitz Aramendi realizó la tarea de trasladar, hace unos días, a 'Ata', Agirrebabiria y Maite Aranalde hasta el edificio donde se encontraba situada la vivienda, los introdujo por el garaje con el fin de que no fueran vistos y trataron de aparentar que la vivienda estaba vacía. Por este motivo, los etarras no salían de su escondite y era Aramendi quien les abastecía de alimentos y de todo lo que necesitaban.

Entre los más buscados

El principal detenido, Karrera Sarobe, alias 'Ata', está considerado por los expertos en la lucha antiterrorista uno de los 'duros' de la organización y tenía una estrecha relación con Garikoitz Aspiazu 'Txeroki' hasta su detención en noviembre de 2008. Nacido en Pamplona el 30 de mayo de 1972, huyó sin motivo aparente en 2003 y las fuerzas de seguridad le relacionan con el asesinato del dirigente aragonés del PP Manuel Giménez Abad (mayo de 2001), el del guardia civil Juan Carlos Beiro (septiembre 2002) y la muerte de dos policías en Sangüesa (Navarra) en mayo de 2003.

Tras la detención el pasado mes de marzo de Ibon Gogeascoetxea, fuentes de la lucha antiterrorista situaron a Karrera Sarobe al frente del 'aparato militar' de ETA, puesto en el que, no obstante, algunas fuentes llegan a situarle incluso antes, tras la caída de Jurdan Martitegi, en abril de 2009. Las fuerzas de seguridad consideran que fue él quien ordenó el traslado de material explosivo a Portugal, a la casa de Óbidos, y quien está detrás de los más recientes movimientos de la banda terrorista.

Junto a Mikel Karrera ha sido detenido Arkaitz Agirregabiria del Barrio, de 27 años, al que se le relaciona con el asesinato del gendarme Jean-Serge Nérin en marzo de este año en las afueras de París, la última víctima de ETA. Agirregabiria, natural de Bilbao, fue detenido por la colocación de un artefacto casero contra la casa del pueblo de Derio (Vizcaya), en julio del año 2005, que no llegó a explotar. La Ertzaintza le detuvo en noviembre de ese año. Cuando se iba a celebrar el juicio contra él en la Audiencia Nacional en el año 2008, no compareció y pasó a la situación de huido.

Por su parte, Maite Aranalde Ijurco, se dio a la fuga desde su domicilio de Ibarra (Guipúzcoa), tras permanecer en libertad bajo fianza. Un error por parte de Francia en la orden de detención y entrega de la terrorista, que se perdió, favoreció su huida, ya que cuando fue a ser detenida ya había dejado su domicilio.

El CNI dio la voz de alarma

Una conversación entre dos colaboradores de ETA acerca de prestarse "las llaves del piso de Bayona", interceptada por el CNI, levantó las sospechas de los servicios de inteligencia que derivaron días después en la operación llevada a cabo esta mañana, según fuentes de la investigación. Las mismas fuentes han señalado que esa conversación se interceptó hace tiempo y, a partir de ella, se intensificaron las tareas de vigilancia ante las sospechas de que la citada vivienda fuera a ser utilizada para albergar alguna reunión de miembros de ETA.

En concreto, las tareas de seguimiento se centraron especialmente en torno al miembro legal de ETA detenido, Benoitz Aramendi. Los investigadores detectaron en él varios movimientos extraños y cómo llegó a trasladar en su coche a tres individuos sospechosos hasta el piso. Entre los investigadores cobró fuerza que podía tratarse de importantes dirigentes de la banda, tal y como se ha confirmado tras su detención.

Aramendi fue quien facilitó el piso a la cúpula de ETA y quien se encargaba de abastecerles. El mismo fue el encargado de alquilar el piso. Asimismo, trasladó hace unos días a 'Ata', Agirregabiria y Maite Aranalde hasta el edificio donde se encontraba situada la vivienda. Los introdujo por el garaje con el fin de que no fueran vistos y trataron de aparentar que la vivienda estaba vacía. Por este motivo, los etarras no salían de su escondite y era Aramendi quien les abastecía de alimentos y de todo lo que necesitaban. Sin embargo, este piso de la localidad gala de Bayona estaba siendo controlado desde hacía días por agentes del CNI.

La banda terrorista cuenta en el sur de Francia con una red de colaboradores, habitualmente miembros legalesa -no fichados por la Policía-, que prestan servicio a la banda para concretar citas o de apoyo en actividades logísticas como desplazamientos, cobertura a la hora de cruzar la 'muga' (frontera) o prestar alojamiento, entre otras labores. Frente a ello, el CNI cuenta con sofisticados sistemas de interceptación de las comunicaciones para controlar su actividad y que en varias ocasiones han propiciado el arresto de miembros destacados, como Jurdan Martitegi o Garikoitz Azpiazu Rubina, alias 'Txeroki'.

Simpatizantes radicales increpan a la Policía

El registro de la vivienda ha finalizado a las 20:20 horas, más de 14 horas después del arresto, tras el que tres de los arrestados han sido conducidos a dependencias policiales. La Policía francesa ha permanecido en la vivienda desde las 6:15 horas de la mañana con tres de los cuatro arrestados, Mikel Carrera, Arkaitz Agirregabiria y Maite Aranalde, quienes, una vez finalizadas las pesquisas en el lugar, han sido conducidos en una comitiva de cinco vehículos de la Gerdarmería a dependencias policiales.

Cuando las dotaciones de la Policía gala abandonaban el lugar con los arrestados, un grupo de simpatizantes radicales ha abordado los vehículos y los han golpeado, mientras proferían gritos de apoyo a los tres presuntos terroristas detenidos, han informado testigos presenciales. Se ha inspeccionado a fondo la vivienda y se ha incautado de "abundante material informático" y documentación, según fuentes de la investigación.