ENTERRADO VIVO
Actualizado:La épica que le ha faltado este año al Real Madrid para remontar aquellos resultados que lo enterraban vivo. es la que le sobra en estos últimos meses a un chaval de 23 años que se llama Rafael Nadal y que a pesar de haber sembrado dudas incluso en sus incondicionales ha sabido remontar el vuelo. El pasado domingo conseguía mejorar los resultados de la gira de tierra batida de la temporada pasada imponiéndose de manera clara y sobria a Roger Federer en la final del Masters de Madrid, unas instalaciones en las que debido a la altitud de la ciudad la pista es mucho más rápida que al nivel del mar y por tanto no domina tan bien como quiere el mallorquín. A pesar de los pesares, y de que el año pasado fue ahí donde se sentaron las bases de su declive, una victoria sin excesivos problemas nos ha hecho ver de manera aún más clara que este año sí va a caer el quinto Roland Garros, con el que conseguirá su séptimo Grand Slam y se quedará a muy pocos puntos de Roger Federer, que consiguió arrebatarle el número uno del mundo mientras el mallorquín estaba en casa lesionado sin poder defender los títulos de Roland Garros y Wimbledon. Y por medio, el divorcio de su padres. Casi nada. Son muchos los tenistas que han querido ocupar y usurpar ese puesto de alternativa real a Roger Federer, pero todos son humanos y ninguno ha demostrado ni la calidad ni la regularidad de Rafael Nadal. A Andy Murray se le espera que gane un Grand Slam y no lo consigue, Juan Martín del Potro ya tiene un US Open pero su cuerpo le está haciendo pagar los excesos de una temporada sobrecargada y Novak Djokovic, el que más potencial tiene, no termina de arrancar. Los madridistas encontramos consuelo en Rafael Nadal, que seguro, tirando de épica como siempre hace, nos dará una primavera y un verano lleno de satisfacciones. Que nadie le entierre vivo de nuevo.