Una británica mata a sus hijos de uno y cinco años en Lloret

Los vecinos de Lloret de Mar (Gerona) trataban ayer de sobreponerse tras conocer el brutal crimen cometido por una turista británica, detenida como presunta responsable del asesinato de sus dos hijos pequeños. A la espera de la autopsia, los niños habrían fallecido asfixiados a manos de su propia madre, en la habitación de un hotel.

Según fuentes de los Mossos, sobre las 16.00 horas recibieron un aviso de la Policía local de Lloret, en el que les solicitaban que se acercaran a un establecimiento hotelero de la localidad costera porque habían encontrado los cuerpos sin vida de dos menores. «Cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, comprobaron que había dos niños muertos en el interior de una de las habitaciones del hotel», explicó un portavoz de la Policía autonómica. Los pequeños estaban tumbados en la cama y tapados por una sábana. Acto seguido detuvieron a la madre por su presunta relación con los hechos. Aunque en el momento en que fue arrestada, la presunta homicida estaba confusa, aturdida y en estado de 'shock', fuentes de la investigación señalaron que poco después, la mujer, de entre 30 y 40 años, reconoció haber matado a sus hijos. Las causas son por ahora una incógnita.

Los dos pequeños, un bebé de un año y una niña de cinco años, respectivamente, fueron hallados muertos, sin aparentes signos de violencia, después de que su madre avisara a la recepcionista del hotel Miramar, donde los menores y la mujer estaban de vacaciones desde hacía días. Al parecer, la Policía Local de Lloret recibió el aviso del hotel sobre las 14.00 horas, poco después de que la mujer se presentara en la recepción para pedir una ambulancia porque sus hijos no se encontraban bien. Cuando los servicios de urgencia llegaron a la habitación de la primera planta, no pudieron más que certificar la muerte de los niños. Hacía rato que habían fallecido, según establecieron los facultativos.

La madre, de la que no trascendió su identidad, conducida por los Mossos salió del hotel cubriéndose el rostro con las manos. Según fuentes cercanas a la investigación, la mujer, delgada, de pelo moreno y con camisa azul en el momento de la detención, ha estado casada dos veces y en ambas ocasiones su matrimonio fue un fracaso. Además, los investigadores tratan de averiguar si pudiera sufrir algún tipo de trastorno mental.

Las mismas fuentes señalaron que uno de los maridos habría estado en prisión. La Policía trasladó a la principal sospechosa a la comisaria de Blanes (Gerona), mientras que se trabajaba para localizar al padre o padres de los pequeños, cuyos cuerpos fueron trasladados al Instituto de Medicina legal de Gerona, donde hoy se les practicará la autopsia.