Números verdes
Los socialistas van a tener que aplicarse a fondo para explicar el reajuste de Zapatero
Actualizado:Entre el timo de Dubai y Pepe el Trompeta sólo hay un punto en común: Todos soñamos con el milagro. La crisis y sus constantes amenazas engordan aún más si cabe las ganas de escapar de la realidad. Cobrar un sueldo de 600 euros al día por colocar cristales puede parecer inverosímil incluso en un país del petróleo. Pero en Punta Umbría las colas de gente que se lo creyeron daban la vuelta al pueblo.
Es un ejemplo claro de que algo se está moviendo, y no en el sentido que dice el presidente de la Junta, el de la recuperación económica, el de los números verdes, como añade su portavoz, Mar Moreno. La sensación que hay es de cierta desesperación.
La de la ciudadanía al ver que cada vez el cinturón hay que apretarlo más y de que nuestros gobernantes no atinan al hacer pronósticos. Justo un día después de que aquí se hablara de que el ajuste no sería abrupto, Zapatero anuncia un brutal reajuste.
Quizás el presidente del Gobierno ha sido más valiente que sus compañeros andaluces al admitir que hay que hacer un esfuerzo. Si la cosa va mal, ¿por qué tanto empeño en decir que lo peor ha pasado? Que le expliquen ahora a los funcionarios, los pensionistas y los benefactores de la Ley de Dependencia lo de los números verdes.