Miguel atropella a dos ancianas

El futbolista portugués Miguel Brito no gana para disgustos. El lateral derecho del Valencia atropelló ayer a dos ancianas en un paso de peatones de la localidad de L'Eliana cuando se dirigía a Paterna para participar en el entrenamiento de su equipo, en las horas previas al partido de Liga contra el Xerez. A bordo de su deportivo Bentley, Miguel se disponía a tomar una rotonda cuando al intentar evitar a una furgoneta que frenó delante de él se subió a la acera y arrolló en el paso de cebra a dos mujeres de 74 y 68 años. Una de ellas sufrió traumatismo craneoencefálico y la otra una lesión en la cadera. «Estoy muy preocupado. Les pido perdón de corazón. Espero que las señoras se recuperen cuanto antes», declaró casi con lágrimas en los ojos Miguel, cuyo polémico comportamiento fuera de los terrenos de juego siempre ha marcado su trayectoria en el Valencia.

El jugador luso, además de herir a las dos mujeres, también golpeó al vehículo del carril contiguo. Tras ser sometido al control de alcoholemia, dio negativo. La policía atribuye a un despiste el accidente, mientras Miguel justificaba así el atropello: «Intenté no chocar contra la furgoneta y me encontré de cara con las señoras. He intentado evitarlas, pero no he tenido la suerte de no tocarlas». Las víctimas fueron ingresadas en el hospital Arnau de Vilanova y el futbolista debió prestar declaraciones ante la Policía Local, a la espera del resultado de las diligencias remitidas al juzgado de guardia.

Se trata del último de los muchos incidentes protagonizado por el defensa internacional del Valencia desde que hace casi cinco años milita en el equipo 'che'. Sus continuos actos de indisciplina han provocado que el club se haya planteado en varias ocasiones su traspaso, aunque nunca ha encontrado comprador para un jugador con un pasado tan conflictivo y tan amante de las juergas nocturnas. Hace poco más de cuatro meses, el día después de Navidad, durante las vacaciones, de madrugada, fue detenido tras verse involucrado en una pelea con armas de fuego a las puertas de una discoteca a la que pretendía entrar el futbolista junto a otras personas.

Los jueves, fiesta

También se vio inmerso en una disputa con policías de paisano en otra discoteca de Valencia junto a su compatriota Manuel Fernandes, en enero de 2008, al ser acusados por un cliente de haber robado un reloj. Miguel, acompañado por su hermano, no fue detenido, pero sí tuvo que pasar por comisaría, mientras que Fernandes debió dormir en el calabozo y fue sometido a un juicio rápido por dicho altercado. Por aquel incidente, ya que los futbolistas del Valencia tenían prohibido salir de fiesta los jueves por la noche, Miguel, de 30 años, fue sancionado económicamente por incumplir el régimen disciplinario.

Recientemente se ha desvelado también la afición al tabaco de Miguel, quien reconoce que fuma desde los 14 años, aunque en la actualidad, «sólo dos o tres cigarritos». Respecto a las fiestas, admite que mientras antes, en Lisboa, cuando militaba en el Benfica, salía dos o tres veces por semana, en el Valencia lo hace todos los jueves y no tiene por qué ocultarlo: «Me he acostumbrado. Me gusta salir ese día como a vosotros en España. Es cuando más gente sale. No me escondo».