«Alcanzar los cinco millones de parados va a depender de la economía internacional»
Celestino Corbacho Ministro de Trabajo e Inmigración«Ha llegado el momento de cuestionar los informes de tantos expertos. Nadie adivinó la profundidad de la crisis», afirma Corbacho
Actualizado:Celestino Corbacho (Valverde de Leganés, Badajoz, 1949) afronta con optimismo el peor momento de la crisis, con más de 4,6 millones de parados. El ministro anuncia que abril y los próximos meses serán buenos para el trabajo, pero advierte de que aunque la economía crezca este año, no será suficiente para crear empleo y, a diferencia de otros compañeros de Gabinete, no descarta llegar a los cinco millones de desempleados.
-El paro ha llegado al 20% y ustedes siguen diciendo que estamos saliendo de la crisis. ¿Cómo se entiende eso?
-La crisis no ha acabado ni en España ni en todas las economías desarrolladas. Sucede que están apareciendo los primeros indicadores positivos desde hace más de un año. Me atrevería a decir que estamos en el ajuste final de la crisis, pero otra cosa es el tiempo que necesitaremos para salir de ella.
-¿Llegaremos a los cinco millones de parados?
-Va a depender de los comportamientos de la economía a escala internacional. Nuestras previsiones para 2010 sitúan la cifra de paro en el 19%, pero el propio Gobierno reconoce que habrá puntas del 20%... Pero abril será positivo en términos de empleo y de afiliación a la Seguridad Social, y eso no lo recoge la EPA. Ahora estamos en un proceso de dientes de sierra y la media del paro rondará este año el 19 ó el 20%.
-Como ministro de Trabajo, ¿se siente frustrado con esos niveles récord de desempleo?
-El ministro de Trabajo no destruye empleo. El empleo lo ha destruido la economía financiera y especulativa. Mi función, como ministro socialista en época de crisis, es velar para que los derechos de los trabajadores no se vayan al garete.
-Los expertos dicen que no se crea empleo sin crecimientos del 2,5%, y eso parece que no va a ocurrir hasta dentro de varios años.
-Creo que ha llegado el momento de cuestionar los informes de tantos expertos. Nadie adivinó la profundidad de la crisis y ahora parece que todo el mundo tiene un recetario de lo que va a pasar. Hay que relativizar que sólo se crea empleo con crecimientos superiores al 2,5% del PIB. El escenario próximo es que esperamos que la economía crezca este año sin generar empleo pero con un cambio en la percepción de los ciudadanos.
-Al Gobierno se le acusa de no generar confianza.
-Bueno... Desde que estalló la crisis de 2008, el Gobierno ha tomado un conjunto de medidas para generar confianza entre los ciudadanos. A veces este país olvida fácilmente. Desde hace año y medio, por ejemplo, se han garantizado los depósitos de los ciudadanos hasta 100.000 euros por cuenta y persona, se han sostenido los cimientos del sistema financiero y se han aprobado inversiones millonarias para sostener la actividad económica.
-¿Cuándo debería estar aprobada la reforma laboral?
-Estoy convencido de que habrá acuerdo. Creemos que se cerrará en las próximas semanas, si es posible por consenso, pero si no, nuestra responsabilidad es gobernar en beneficio de los intereses del país.
-¿Por qué se apuesta por generalizar el contrato de fomento del empleo cuando no ha sido precisamente el más utilizado por los empresarios?
-Una vez que tomamos la decisión de que no se abre la vía para introducir nuevos tipos de contratos, el de fomento es sobre el que debe pilotar la reforma. Es verdad que es un contrato que no ha tenido un gran uso, pero fue pactado en 1997 por los agentes sociales y ahora puede ser el referente.
-¿Rebajarán las cuotas sociales?
-La Seguridad Social debe garantizar la sostenibilidad del sistema. De él dependen más de 8 millones de pensiones. El Pacto de Toledo está trabajando y cualquier cambio sobre la Seguridad Social procedará de ese marco.
-¿Y la opción del contrato único?
-No es objeto de análisis ni de discusión.
-¿Es coherente que se quiera ampliar la edad de jubilación cuando su Gobierno no han hecho nada para frenar las prejubilaciones?
-Lo importante es acabar con la idea de tirar de la jubilación anticipada como concepto cultural, especialmente por empresas que están en beneficios. Puedo entender una prejubilación cuando es para acometer un ajuste sectorial o de una empresa. Parece razonable que si se tiene que reducir plantilla, el ajuste se realice sobre personas de mayor edad. Pero si una empresa tiene beneficios y prejubila personal, debe pagarlo ella.
-¿Se ha aplazado el debate de las pensiones?
-Podemos aplazarlo pero no evitarlo. En 2030 habrá cuatro millones de pensionistas más que ahora. Eso significará que la gente deberá estar el mayor tiempo posible trabajando. La discusión será cómo lo hacemos: por obligación o por incentivación. Habrá que esperar al Pacto de Toledo.
-¿Sigue recomendando fondos o planes de pensiones?
-No lo recomiendo yo, lo recomendó el Pacto de Toledo en 1995 y en 2003. Hay que tener en cuenta que cuando uno llega a la jubilación se cobra entre un 20% y un 30% menos que el último salario. Por tanto, hay que decidir si se destina ahora parte del ahorro a complementar la pensión o, por el contrario, uno se conforma con cobrar menos cuando se deje de trabajar. Yo seré muchas cosas, pero no un hipócrita. Si alguien me pregunta si tengo un plan de pensiones, digo que sí, como lo diría cualquier ciudadano normal si le hicieran esa pregunta.
-¿Hasta cuándo puede soportar el Estado el nivel de gasto social actual?
-Creo en un sistema de protección y quien tiene más debe contribuir al bienestar de todos. Europa ha construido un modelo de cohesión social y durará mientras la situación económica no permite generar riqueza suficiente para que alguien no tenga necesidad de estar protegido. La gente no quiere protección, quiere trabajo, pero si no hay empleo, algún sistema de protección debemos tener.
-¿Garantiza que no habrá recortes en el gasto social?
- Sin duda. Es una seña de identidad de este Gobierno aunque otras opciones políticas consideren que no es así. Por suerte, hoy no estamos en una lucha de clases y el ADN de un socialista representa dos cosas: no menospreciar lo público y compromiso con las políticas sociales.
-¿En qué medida cree que la crisis de Grecia puede retrasar la recuperación de nuestro país?
-La UE tiene que tener un compromiso con todos los países que la integran. Grecia debe encontrar la respuesta a su situación en Europa y la UE debe reaccionar para evitar un proceso de fichas de dominó. Estoy convencido de que Europa va a responder.
-¿La caída de las bolsas es la respuesta a la falta de confianza en el Gobierno?
-Las bolsas tienen comportamientos independientemente de los gobiernos. Sí son termómetros por el impacto sobre los inversores y el estado de ánimo, pero la lógica bursátil va por otro lado y hay que ser experto para entenderla.
-¿Qué le parece la última rebaja del 'rating'?
-Tendríamos que saber quién hace los informes y con qué intereses. Al final, más pronto o más tarde, será necesario una gobernación de todos los sistemas de control y análisis. De todas formas, creo que debemos tener confianza.