Las casetas apuestan por congelar los precios

«Llevamos dos años con los precios congelados». Así se manifiesta la mayoría de los caseteros del recinto ferial, que recuerdan que desde 2008 no han vuelto a subir el coste de la comida ni de la bebida que sirven en sus casetas. En este sentido, subrayan que la crisis comenzó a golpear con fuerza el año pasado y, a partir de ahí, se ha visto bastante resentido el consumo. La idea en esta edición, explicó el portavoz de la Asociación Unión de Casetas, Óscar Real, era incluso llegar a bajar los precios, pero «no ha sido posible».

Y es que según Real «la alcaldesa dijo que iba a reunirse con los caseteros para llegar a un acuerdo en este sentido, pero al final no lo ha hecho». Otro de los objetivos es que se uniformaran los precios, pero al final «habrá libre mercado».

«Otra cosa -añadió el portavoz de la Asociación Unión de Casetas- es que algunos hayan decidido rebajarlos a causa de la crisis, porque si no venden menos».

El encargado de la caseta de Cajasol, Javier Randado, asegura que «aquí el último año que se subieron los precios fue en 2008». Hay que tener en cuenta que «los sueldos de la gente también han bajado», aunque Cajasol espera «vender este año algo más, aunque sea con un ligero incremento».

Como otros muchos empresarios que trabajan estos días en el Real, critica que «el Ayuntamiento siempre exprime a los mismos». Se refiere Randado a la subida de algunos servicios, fundamentalmente el agua y la luz. El portavoz del colectivo de caseteros, Óscar Real, confirmó que «en un momento de crisis total, han aumentado muchísimo lo impuestos».

Subida del agua y la luz

En este sentido, Real indicó que «el agua y la luz se han incrementado una barbaridad, y luego Pilar Sánchez pide encima que se bajen los precios».

Otra de las denuncias que hace el portavoz es que el Ayuntamiento no ha cumplido uno de sus compromisos: la instauración de la ventanilla única para simplificar los trámites. «Como no lo han hecho, hay que dar 500 vueltas con todo el papeleo», aseguró.

En la caseta de CC OO no entran en esta polémica, pero sí garantizan que sus precios «son de los más competitivos de la Feria; mucha gente incluso pregunta aquí cuánto vale cada cosa para, en función de la información, poner sus propios precios».

En Club Nazaret, esperan que la gente consuma lo mismo que en años anteriores. Para ello, no se puede ahogar al consumidor y se mantendrán en la línea de 2009, cuando «ya se bajó bastante». En el caso de Holcim, José Luis Muñoz, propietario del bar Rody, tiene «precios de 2008».

Por cierto que la Asociación Unión de Casetas, a diferencia de la mayoría de colectivos hosteleros, sí se ha mostrado a favor de la coincidencia de las motos y la Feria: «Para nosotros va a ser bastante bueno», aseguró Óscar Real.