Los emigrantes españoles no podrán votar en las elecciones municipales
El Congreso reformará la ley electoral para que un tránsfuga ya no pueda provocar un cambio de gobierno en un ayuntamiento
MADRID.Actualizado:Los ciudadanos con nacionalidad española pero residentes en el extranjero no podrán votar a partir de ahora en las elecciones municipales. La medida entrará en vigor en las del próximo año. Se trata de un acuerdo alcanzado hoy en la subcomisión electoral del Congreso que en los próximos meses se introducirá en la ley.
La medida afectará a algo más de 1,3 millones de personas que sí pudieron ejercer su derecho a voto en las municipales de 2007, y a otro medio millón adicional que en un corto plazo adquirirán la nacionalidad española gracias a que son descendientes de exiliados del franquismo, y que se verán beneficiados por la ley de memoria histórica. Los grupos políticos, alertados por el Consejo de Estado, consideran que en la elección de alcaldes y concejales sólo deben votar los residentes reales en el municipio. Hasta ahora, se había forzado la ley con el voto emigrante. La reforma legal puede provocar cambios importantes en algunos municipios de zonas como Galicia, Asturias, Madrid o Canarias, con decenas de miles de residentes en el exterior empadronados en sus pueblos y ciudades. Podrán seguir votando en elecciones generales, autonómicas y europeas.
El sistema de voto emigrante también aumentará en garantías y transparencia. Podrán votar en urna en los consulados, en los días previos a los comicios, y por correo, pero a solicitud propia y tras identificarse correctamente con pasaporte y certificado personal del censo (como en España).
Otro cambio sustancial que se trasladará a la reforma legal trata de evitar que uno o varios tránsfugas, muchas veces ligados a casos de corrupción urbanística, puedan pactar con otros partidos y derrocar c on sus votos un gobierno municipal. A partir de ahora, en las mociones de censura contra un alcalde harán falta tantos votos como la mayoría absoluta más el número de concejales tránsfugas, lo que hará que estos personajes sean inocuos e insignificantes.
El tercer cambio en la ley que aconsejará introducir la mayoría de la subcomisión también se orienta a lograr una mayor limpieza en los comicios electorales. Tiene que ver con los cambios de municipio de un número importantes de ciudadanos, que se reflejan en el censo en los días previos a las votaciones, y que pueden estar ligados a variar los resultados en esas localidades de forma artificial.
La ley cerrará el censo dos meses antes de la convocatoria electoral, y sólo permitirá modificaciones formales, pero nunca nuevos empadronamientos. Además, si detecta cambios de este tipo los notificará a los partidos para que recurran.