El Ejército mexicano libera a 16 personas secuestradas por los zetas en un rancho de Nuevo León
En el enfrentamiento murieron dos presuntos sicarios en una finca situada en el municipio de Sabinas Hidalgo
NUEVO LEÓN Actualizado: GuardarSoldados del Ejército mexicano han liberado en un rancho de Nuevo León, en el norte del país, a 16 personas que estaban encadenadas y que al parecer fueron secuestradas por sicarios del grupo narcotraficante 'Los Zetas'. Un portavoz de la Séptima Zona militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha explicado que se libró un enfrentamiento en el que murieron dos presuntos sicarios en una finca situada en el municipio de Sabinas Hidalgo, donde estaban los secuestrados.
El rancho está lituado a unos cien kilómetros al norte de Monterrey, la capital de Nuevo León, en una zona serrana del municipio de Sabinas. La fuente ha explicado que entre los secuestrados había una mujer y un menor de entre dos y tres años. Los demás son varones cuya identidad se desconoce. Al parecer varios sicarios lograron escapar de la zona al verse sorprendidos por los militares, que usaron en la operación helicópteros y vehículos.
El grupo de personas será trasladado en helicóptero a dependencias militares donde está previsto que sean interrogadas por personal castrense para conocer cómo fueron secuestrados. En el rancho los militares también hallaron 30 armas y dos toneladas de marihuana empaquetada, según datos preliminares.
Ola de violencia en el país
El suceso se produce un día después de que militares mexicanos se enfrentaran con pistoleros en un rancho conocido como 'El Puerto', ubicado en una zona entre el municipio de General Bravo y Doctor Coss, también en Nuevo León, y mataran a tres sicarios. Tras esta acción, trascendió que en el lugar fueron encontradas y liberadas también siete personas, que eran agricultores de esta zona del norte de México que habían sido víctimas de extorsión. A los delincuentes, cinco de los cuales fueron capturados, les fueron intervenidos más de 10.000 cartuchos, 40 armas largas y doce camionetas.
La ola de violencia en México se ha recrudecido, y son más frecuentes acciones de los sicarios contra las fuerzas del orden, sean militares y policías. Nuevo León y Tamaulipas son dos estados con fuerte actividad de los cárteles de las drogas, dado que hacen frontera con Estados Unidos, lo que aprovechan los narcotraficantes para establecer rutas de contrabando.
El Gobierno mexicano ha desplegado un total de 65.000 militares y policías federales por todo el país para tratar de frenar la violencia de los cárteles. A pesar de que ha habido numerosas detenciones, las muertes continúan y hasta mediados de abril ascienden a 22.743 casos desde que en diciembre de 2006 el presidente Felipe Calderón lanzó su estrategia de lucha frontal contra el crimen organizado.