La declaración del testigo estrella, sin validez

Una de las consideraciones más curiosas del juez es la valoración «desalentadora» que hace de la declaración del testigo estrella de la acusación particular. Como figura en la sentencia, el testimonio de Manuel Balongo, vigilante de la caseta La vaca de lunares, crea «enormes dudas» sobre lo ocurrido.

A pesar de que Balongo fue el único que reconoció al imputado como autor del botellazo, el magistrado cree que dada su relación anterior con éste, no se pueden extraer conclusiones definitorias. «A pesar de que el testigo haya intentado ocultar su relación con el acusado -argumenta-, es obvio que ya habían tenido enfrentamientos con anterioridad», lo que unido a las vaguedades de su declaración no ha podido arrojar luz sobre el asunto. Hay que recordar que el Ayuntamiento también formaba parte del procedimiento, en calidad de presunto responsable civil subsidiario del delito, al ocurrir en un espacio público y en horario fuera del reglamentario. Sin embargo, la exculpación del acusado implica también la de la Administración local.