Entierro real en Polonia para Lech Kaczynski
El presidente y su esposa reciben sepultura en el castillo de Wawel con la ausencia de numerosos dignatarios mundiales
VARSOVIA.Actualizado:El presidente de Polonia, Lech Kaczynski, y su esposa, Maria Kaczynska, fallecidos en accidente aéreo en Rusia el pasado día 10 junto con otros 94 representantes de las más altas instituciones del país, fueron enterrados ayer en una cripta de la catedral del castillo de Wawel en Cracovia, un emblemático lugar donde descansan los reyes y héroes nacionales. La ceremonia fúnebre, que iba tener repercusiones internacionales, se llevó a cabo finalmente sin la presencia de los principales líderes del mundo que habían anunciado su participación. La culpa la tuvo la nube de ceniza volcánica que paraliza gran parte del tráfico aéreo europeo y que obligó a la mayoría de jefes de Estado y de Gobierno a cancelar el viaje.
En el funeral y entierro de la pareja presidencial no estuvieron destacados mandatarios como Barack Obama, Nicolas Sarkozy, José Luis Rodríguez Zapatero o Angela Merkel, entre otros. Tampoco pudieron acudir los reyes de España, el príncipe de Gales, el monarca sueco y otros miembros de la realeza del Viejo Continente. El presidente ruso, Dmitri Medvédev, a quien los polacos agradecen la solidaridad que les ha brindado Moscú, fue uno de los pocos dirigentes de nivel mundial que estuvo presente. El presidente germano, Horst Köhler, y sus homólogos de la República Checa, Václav Klaus, y Ucrania, Viktor Janukovich, también acudieron, así como el líder del Parlamento Europeo (PE), Jerzy Buzek. Cabe destacar la ausencia del ex presidente polaco Lech Walesa, que era un duro adversario de los gemelos Kaczynski, pero en cambio no faltó el dirigente socialista y también ex jefe del Estado Aleksander Kwasniewski.
La ceremonia dio comienzo a las 14 horas con una emotiva misa por las almas de los difuntos en la basílica de Santa María, situada en la Plaza Mayor de Cracovia, donde se concentró una marea humana que siguió el acto religioso a través de grandes pantallas. La misa, en la que intervinieron los familiares de la pareja fallecida, las más altas autoridades polacas y representantes de los países que pudieron desplazarse hasta Cracovia, fue oficiada por el cardenal Stanislaw Dziwisz, estrecho colaborador del desaparecido papa Juan Pablo II, y el presidente de la Conferencia Episcopal polaca, el arzobispo Jozef Michalik.
Ceremonia
Después, los restos mortales de Lech Kaczynski y su esposa fueron trasladados en vehículos militares hasta al castillo de Wawel acompañados por un cortejo de familiares, clérigos, autoridades civiles y castrenses y representantes extranjeros. Tras su llegada al emblemático santuario cracoviano al son del repicar de las campanas, el cardenal Dziwisz celebró una ceremonia litúrgica en un ambiente de gran emoción. A continuación los dos féretros fueron introducidos en un sarcófago de alabastro de color miel en la cripta de la catedral del castillo, mientras se disparaban veintiún cañonazos en homenaje al jefe del Estado fallecido. La ceremonia fue restringida a la familia y a un reducido grupo de personalidades.