Un volcán cierra el cielo europeo
Una nube de ceniza gigante del Eyjafjalla islandés causa el caos al invadir el continenteMiles de personas se ven varadas en los aeropuertos del Viejo Continente al suspenderse casi 4.000 vuelos
Actualizado: GuardarLa Europa aérea vuelve a estar colapsada. Si en diciembre una inesperada ola de frío causó un caos sin precedentes en el tráfico continental, ayer fue un volcán islandés el que obligó a suspender las conexiones con el norte del Viejo Continente y provocó la cancelación de casi 4.000 vuelos, dejando a miles de pasajeros en tierra. Reino Unido, Irlanda, Noruega, Dinamarca, Bélgica, Países Bajos, Francia, Alemania y Suecia se vieron obligados a cerrar el espacio aéreo -salvo para casos de emergencia- y sus aeropuertos por la inmensa nube de ceniza originada por la erupción del Eyjafjalla, situado en un glaciar del sur de la isla nórdica.
La Agencia Europea para la Seguridad en la Navegación Aérea (Eurocontrol) estimaba anoche que una cuarta parte de todo el tráfico aéreo fue interrumpido ante el temor de que la falta de visibilidad y las miles de minúsculas partículas de roca, cristal y arena que viajan en el seno de la nube pudieran causar algún accidente al dañar las turbinas de los aviones. Este fenómeno también es propicio a la absorción del agua, lo que puede causar cortocircuitos y estropear los componentes electrónicos. Los expertos señalan también que puede disminuir las prestaciones de las aeronaves al depositarse la ceniza sobre las alas.
Gran Bretaña fue el país más afectado y el colapso de sus pistas, sobre todo la londinense de Heathrow -el aeropuerto del mundo con mayor número de conexiones internacionales- provocó un efecto dominó que expandió por toda Europa un día trágico para las comunicaciones vía aérea. Todos los vuelos hacia y desde la capital de Reino Unido fueron suspendidos desde media mañana, lo que extendió el caos hasta países a los que nunca llegará la nube de cenizas.
Doscientos años dormido
El Eyjafjalla hizo erupción, por segunda vez en el último mes después de doscientos años de inactividad, el miércoles. Sus fumarolas erigieron pronto una bolsa de humo y cenizas que, lejos de disiparse como en un principio se creía, creció durante toda la jornada de ayer al tiempo que se trasladaba hacia el sureste por acción de las corrientes de viento. La ceniza pronto invadió territorio de Reino Unido, Dinamarca, Finlandia, Noruega y Suecia. Curiosamente, protegida por las corrientes eólicas del oeste, Islandia apenas resultó afectada por las cenizas y el aeropuerto de Reykjavik funcionó siempre con normalidad. En la isla, en cambio, la corriente de lava provocó inundaciones a raíz del derretimiento de los hielos del glaciar. El aumento del nivel de agua registrado fue de uno a dos metros en un río cercano a Eyjafjälla, lo que obligó a los equipos de rescate a abrir zanjas en los caminos para evitar daños a varios puentes. Más de ochocientos residentes de la región colindante tuvieron que ser evacuados.
El avance de las cenizas también alcanzó Bélgica, Holanda y el norte de Francia, que tuvo que clausurar veinticuatro de sus aeropuertos, entre ellos los tres de París -Roissy-Charles de Gaulle, Orly y Le Bourget-. A estas alturas el caos era total al afectar las suspensiones de forma indirecta al resto de las terminales del continente. Anoche, Rusia estudiaba también la posibilidad de cerrar parte de su espacio aéreo.
Ni Eurocontrol ni las autoridades de los distintos países afectados se atrevían ayer por la noche a dar un plazo concreto sobre el fin de las restricciones. Los meteórologos creen que la nube se disipará durante las próximas horas, pero advierten de que las emanaciones del volcán podrían prolongarse «de varios días a más de un año», según explicó el profesor islandés Tumi Gudmunsson.
Entre los afectados figuran personalidades como el primer ministro noruego, Jens Stoltenberg, el príncipe Haakon de Noruega y el ministro de Exteriores sueco, Carl Bildt, así como miembros de la realeza europea que tenían previsto volar a Copenhague para acudir a los actos del cumpleaños de la reina Margarita II.