Alicia entra en el país de Tim Burton

La esperadísima Alicia en el país de las maravillas, versión Tim Burton, llega hoy a las salas de cine españolas con la intención de cumplir todas las espectativas e incluso superarlas. Un espectáculo brillante y preciosista protagonizado por una Alicia ya mayor, de 19 años, a la que han diseñado una vida perfecta en la Inglaterra victoriana, pero a la que la aparición de un ratón blanco vuelve a arrastrar a un mundo de fantasía del que nada recuerda.

Burton recoge con excelencia el imaginario colectivo que nos legó el inquietante escritor británico Lewis Carroll y da una vuelta de tuerca a una de las fábulas más destacadas de los últimos siglos. Un mundo ya de por sí mágico, moldeado en esta ocasión a golpe de 3D y al que aplica increíbles efectos especiales para animar a los personajes más carismáticos de la historia de la literatura.

Y como un mago, Burton comienza a sacar sorpresas de su chistera en forma de personajes modernizados, paisajes pasados por las últimas técnicas multicolor que ofrecen los programas informáticos y escenas con una enorme potencia visual y cinematográfica.

Colores sobresaturados en un inalcanzable abanico cromático, flores y naturaleza imposibles, personajes que caminan entre el surrealismo y lo 'kitsch' con una equilibrada mezcla entre dibujos animados y humanos con aspecto animado y una técnica que hace posibles todos los excesos imaginados por el director.

Los amores de Tim Burton

Con guión de Linda Woolverton y basado en las obras maestras del escritor británico Lewis Carroll, el cineasta vuelve a traer de la mano a su 'musa' Johnny Deep, que interpreta al Sombrerero Loco, además de Anne Hathaway, su esposa Helena Bonham Carter y Crispin Glover.

En el papel de Alicia, una prácticamente desconocida Mia Wasikowska, que regresa al mundo mágico en el que se adentró siendo una niña para reunirse con sus antiguos amigos: el Conejo Blanco, Tweedledee y Tweedledum, la Oruga y el gato de Cheshire. Un viaje fantástico en el que trata de encontrar su propio destino y poner fin al reinado de la malvada Reina Roja.