Medidas consensuadas
El PP ha acertado respaldando al Gobierno y reclamando medidas de más calado
Actualizado:Después de varias semanas de negociaciones con la oposición en busca de un pacto de Estado contra la crisis, el Gobierno aprobó ayer un conjunto de medidas, resultado del llamado 'acuerdo de Zurbano', que no tiene la entidad de un pacto solemne, como pretendía el Ejecutivo, pero que sin duda alguna va en la dirección correcta. Ésta ha sido la razón que ha forzado al PP a apoyar el paquete de iniciativas, no sin resaltar que su eficacia será escasa si no se ejecutan al mismo tiempo las reformas estructurales necesarias. Además, el PP sigue oponiéndose a la subida del IVA proyectada por el Gobierno en julio. El decreto ley aprobado, que cuenta además con el aval de CiU y quizá de alguna otra minoría, incluye 25 medidas de las 54 incluidas en el pacto de Zurbano, más una más relativa a la rebaja de tarifas de la navegación aérea. Entre otras actuaciones, figuran los préstamos directos del ICO a las pymes y autónomos, las ayudas fiscales a la rehabilitación y el IVA reducido para la realización de reformas, normas para poner orden en las fusiones financieras, reducción de trámites para el FROB, ampliación de la protección frente a embargos por impago de la hipoteca, reducción del IVA en los servicios de dependencia, junto a otras de carácter más singular. El PP, que ha hecho bien facilitando el camino para la puesta en marcha de estas actuaciones, acierta sin embargo al reclamar además reformas de calado, que especialmente deberían fructificar en un pacto educativo, un pacto energético, la reforma del sistema financiero y la reforma laboral. Las medidas de reactivación serán en efecto efímeras si no se inscriben en una evolución profunda del patrón de crecimiento de la economía. El consenso es, pues, necesario porque, cuando nos encontramos probablemente en el punto de inflexión de la recesión, tenemos por delante un proceso muy delicado en el que ha de conjugarse la paulatina retirada de los estímulos fiscales con el comienzo prudente del ajuste fiscal ya en el camino hacia el equilibrio presupuestario. Del acierto con que se recorra este itinerario dependerá tanto la evolución del desempleo cuanto el progresivo crecimiento de la economía, por lo que todos tenemos que estar interesados en acertar y en contribuir por tanto a forjar la estrategia correcta.