El Ayuntamiento anima a recurrir las multas de la Policía Local

La fricción entre el Ayuntamiento de Jerez y la Policía Local ha llegado a tal extremo que la propia delegada de Seguridad, María del Carmen Martínez, está recomendando a la ciudadanía que reclame las multas interpuestas por los agentes durante la Semana Santa. Pocas veces una localidad vivirá un acontecimiento tan rocambolesco, en el que las divisiones internas han llevado al punto de que la Administración ponga a los jerezanos en contra de una de sus medida recaudatorias por excelencia.

Ayer, tras la resaca provocada por la huelga de celo del Sindicato Independiente de la Policía y las bajas masivas de los funcionarios durante el Jueves y el Viernes Santo, Martínez compareció ante los medios para mostrar su indignación por la actitud de buena parte de la plantilla y advertir de la situación a los jerezanos. «A los que han multado les pediría que reclamaran, porque creo que se han excedido. Durante 30 años se ha permitido estacionar en ciertas zonas y de pronto, sin previo aviso, se ponen a multar. Creemos que eso es un abuso de poder».

Con estas declaraciones la edil desmintió una vez más que la idea de incrementar el número de sanciones partiera del propio Consistorio, como así lo dejaron entrever en varias ocasiones los miembros del SIP para encubrir una huelga de celo que ha culminado con la imposición de un 60% de multas más de las habituales. El aumento ha sido tan llamativo que los servicios legales del Ayuntamiento continúan estudiando esta cuestión, así como las repentinas bajas durante los días clave de 130 personas de las 330 que componen la plantilla total, por si hubieran incurrido en alguna ilegalidad.

El tema de las bajas médicas ha sido el que ha colmado la paciencia de las autoridades municipales, que por boca de la delegada de Seguridad manifestaron un profundo malestar tachando el hecho de «irresponsabilidad muy grande» y sentenciando que «no se puede jugar así con los ciudadanos». Ésta fue la respuesta del sindicato después de que el Miércoles Santo se llegara a un acuerdo in extremis por el que los agentes anunciaron que dejaban la huelga de celo en suspenso.

Invalidez del acuerdo

Sin embargo, la condición sine qua non que pusieron sobre la mesa no se cumplió: la alcaldesa debía ratificar el documento con su firma al día siguiente y no lo hizo, por lo que más de la mitad de los funcionarios que debían trabajar esos días se dio de baja. «Llegamos a un acuerdo que no lo firmó ningún conserje, sino la teniente de alcaldesa y ellos aún piden más, que es la ratificación de la alcaldesa -apuntó Martínez-... No lo entiendo, el acuerdo era bastante bueno y ellos lo han roto. Creo que se equivocan, pero aguantaremos el tirón. El acuerdo ahora es papel mojado».

El documento, como confirmó la concejala, suponía una modificación del cuadro horario de la plantilla que iba a repercutir en un aumento de los días libres de los policías durante los principales eventos de la ciudad, algo que para el Ayuntamiento ya carece de validez. Desde el SIP, no obstante, anunciaron ayer que ellos esperarán el transcurso de esta semana para ver si se da alguna reacción municipal y acaba por ratificarse el acuerdo, siempre bajo la firma de la primera regidora jerezana. En el caso de que no sea así (algo que ya ha adelantado Martínez), volverán a la carga en los próximos eventos.