Una oportunidad para el desarrollo turístico
La zona baja de la Sierra quiere subirse al tren de las vías verdes con un trazado de 20 kilómetrosEl nuevo tramo que se recuperaría de la línea de ferrocarril Jerez-Almargen, uniría Arcos con Villamartín, pasando por Bornos
BORNOS. Actualizado: Guardar«Ya dejamos pasar el tren, ahora no podemos dejar pasar el del desarrollo turístico». Bajo esa premisa, el Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Bornos está preparando un proyecto para la creación de la Vía Verde de los Lagos. Antonio Sánchez Baizán es la persona que está estudiando el posible trazado de esta ruta turística de unos 20 kilómetros que uniría Arcos y Villamartín, pasando por Bornos y abriendo la posibilidad de conectarse con Jerez, con otros 30 kilómetros de senderos y con la Vía Verde de la Sierra.
En agosto de 1901 surgió el primer proyecto de construcción de un trazado ferroviario para unir Jerez con la Sierra, para lo que se fundó la Sociedad de Estudios del Ferrocarril de Jerez a Setenil. Proyectaron un trazado de ancho normal de vía pero la ley que regulaba las concesiones de obras ferroviarias daba prioridad a las estrechas. Este hecho y los requisitos técnicos y financieros establecidos en posteriores leyes hicieron fracasar aquella iniciativa de capital privado.
Posteriormente, la dictadura del general Primo de Rivera emprendió las obras del ferrocarril Jerez-Almargen. Se inauguraron el 9 de enero de 1927 y en sólo dos años se explanaron 110 kilómetros, se construyeron 19 túneles, varios puentes y viaductos y siete estaciones. La caída del régimen provocó la paralización de las obras, pero durante el segundo bienio republicano se retomó la iniciativa y se reanudaron. Dificultades presupuestarias y cambios en las directrices en inversiones ferroviarias impidieron la continuación de los trabajos y provocaron el abandono definitivo del proyecto.
Desde hace quince años, a través del Programa Vías Verdes, perteneciente en la actualidad al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, están siendo recuperados miles de kilómetros de líneas férreas en desuso para convertirlos en itinerarios senderistas y cicloturistas para el uso y disfrute de los ciudadanos. Las mismas conservan los puentes, viaductos y túneles que confieren a estas rutas unas especiales cualidades como son la ausencia de pendientes, buena accesibilidad, comodidad, facilidad y seguridad que permiten que sean transitables por todos, cicloturistas, caminantes y personas con movilidad reducida.
Inicio en Villamartín
El primer tramo partiría desde la Estación de Villamartín, convertida en hotel rural. En el trayecto se encuentra un túnel que ha sido tapiado y usado como cabreriza, la fuente La Zarza y una zona de importante de nidificación (lugar de nidos) de aves acuáticas, además de acebuches, lentiscos, tarajes y abundante vegetación palustre. En el segundo tramo se encuentra el puente de los Veintiún Ojos que es la obra de ingeniería más importante de la Vía Verde de los Lagos.
El tercer tramo discurre por la zona de la Ruta del Colesterol en Bornos. Tres kilómetros de caminos polvorientos muy transitados que concluyen en el túnel de los Sauces; además hay otros túneles hundidos. La ruta seguiría con una cuarta zona que va desde el Embarcadero de Bornos hasta el Embalse de la misma localidad. En ella se encuentran túneles hundidos y derrumbados que habría que recuperar y un milenario y endémico bosque-isla de acebuches de gran interés ecológico.
El quinto tramo comenzaría junto a la presa bornense donde se podría recuperar un laboratorio hidronáutico que lleva décadas en desuso y en el que se pueden encontrar maquetas de obras hidráulicas. El resto del trazado continúa por tierras fértiles ocupadas en algunas zonas por ganaderos y agricultores, por lo que habría que desviarlo por la Pequeña Holanda o un camino alternativo que lleva hasta la presa de Arcos.