Muere un aficionado del PSG que fue apaleado en un partido contra el Marsella

Un aficionado del París Saint Germain (PSG) que había sido apaleado en febrero durante un partido de fútbol entre su equipo y el Marsella en la capital francesa murió anoche a causa de las heridas, según ha confirmado el ministro francés del Interior, Brice Hortefeux.

"Era algo que temíamos", ha declarado Hortefeux en una entrevista a la emisora de radio RTL, en alusión al grave estado en que se encontraba ese hombre de 37 años desde que sucedieron los acontecimientos el 28 de febrero. De hecho, el lunes se le desconectó la respiración artificial porque desde el viernes se consideraba que su estado era de muerte clínica.

El ministro ha puesto el acento en que "desde hace semanas" se han tomado "las medidas que hacían falta" para que este tipo de sucesos no se repitan y para que los aficionados puedan ir al fútbol, también en familia, con tranquilidad. Así, se han "multiplicado las detenciones" y se ha prohibido a 662 personas, consideradas violentas, la entrada en los estadios.

Refuerzan las medidas de seguridad

El titular de Interior ha recordado que, de acuerdo con los directivos del PSG, se han tomado "medidas de seguridad particularmente reforzadas" y, de esta forma, el partido que tiene que jugar en Niza contra el equipo local el sábado se celebrará a puerta cerrada y con un dispositivo de orden público en torno al estadio. "Si hay que ir más lejos, el Gobierno no dudará en hacerlo", ha subrayado.

El muerto pertenecía a una franja extremista del grupo de hinchas del PSG que se concentra en la curva de Boulogne, una de las tribunas del estadio, y según la investigación recibió una paliza de varios miembros de otro grupo del mismo equipo, los de la curva Auteuil, y fue abandonado en estado crítico.

Cinco hombres han sido arrestados en el marco de la investigación policial para esclarecer este enfrentamiento entre grupúsculos radicales de la hinchada del PSG, que se produjo en un clima bastante tenso. Ante el riesgo de que se produjeran incidentes, los aficionados del Marsella habían renunciado a acudir al partido en la capital francesa.