«El Prendimiento me debe 112.400 euros, y no se digna ni a recibirme»
Un empresario de la construcción al que la crisis ha golpeado de lleno reclama a esta Hermandad una deuda que Fivesur le traspasó
JEREZActualizado:En 2008 José Pinto era un pequeño empresario de la construcción que se dedicaba a un aspecto tan novedoso como las obras en ladrillo de gran formato, que tenía un negocio próspero y que llegó a contar con una plantilla de 97 personas. Hoy, tras el pinchazo del sector y, sobre todo, de la constructora Fivesur, tiene a sus espaldas muchas deudas a causa de los 725.000 euros que le han dejado impagados las empresas con las que trabajó como subcontratista. Y eso pese a todos sus esfuerzos por salir adelante y a que está personado en cuatro concursos de acreedores.
Una de las mayores deudas que arrastra son los 390.000 euros que Fivesur tenía que abonarle. Por eso, cuando la empresa echó el cierre muchos vieron el futuro muy negro, como este empresario de Bornos. Sin embargo, él decidió buscar la mejor fórmula de ir logrando que se le ingresara parte de esos impagos, y tras una serie de negociaciones dentro del proceso concursal con la constructora ésta le cedió algunas de sus propias deudas, para que Pinto las cobrara y pudiera poner «algún parche» a la situación por la que atravesaba.
Fue así como José Pinto se hizo cargo de las facturas que Fivesur tenía por obras como la de la rehabilitación en la capilla asilo San José de la Hermandad del Prendimiento, hasta un total de 112.432 euros, y de las que Pinto pasó a ser el nuevo acreedor. En el acta notarial que se firmó para la cesión de esa deuda «están todas las facturas, los contratos de adjudicación y toda la documentación que me acredita y me da poderes para cobrarla», dice este empresario mientras las muestra.
Un burofax sin respuesta
Eso fue lo que le notificó a la Hermandad con un burofax en junio de 2008, «pero nunca me contestaron» se queja antes de añadir que «sólo me atendieron por teléfono, aunque yo hice gestiones y moví todos los hilos».
Unos meses después, tras el verano de 2008 Pinto logra que haya una reunión en el Ayuntamiento con el entonces hermano mayor, Antonio Medrano, y el que lo sustituiría, Javier Soria, a la que asiste también el director financiero del Consistorio, Cornelio Vela, que «cuya Gerencia de Urbanismo certificó las facturas».
Allí pactan que le empezarían a pagar a partir de enero de 2009, y Pinto ve la luz porque «los bancos me agobiaban y yo necesitaba fondos para evitar embargos sobre mi casa, que tuve que hipotecar varias veces para ir tirando».
Pero el dinero no llegó, y «se me cerraron puertas que había logrado abrir con la promesa de que me iban a pagar, como un acuerdo con el banco para que me dieran algo de crédito». Desde la Hermandad sólo le dijeron que para que pudiera cobrar era necesario que los dos administradores concursales de Fivesur ratificaran la validez de las facturas. «El trámite era muy difícil, pero sin ese papel poco podía hacer yo», dice. Por eso no paró hasta lograr el documento, aunque en el empeño ha tardado un año, hasta febrero de este mismo año.
Sin embargo, y pese a que ahora tiene «toda la documentación que me piden», Pinto denuncia que «el Prendimiento niega que me deba nada, dicen que ellos no tienen que pagar, y ni se dignan a recibirme».
Por eso, este empresario que se vio obligado a darse de baja como autónomo a final de 2009 -y que tuvo que pedir a sus padres un dinero que les obligó a hipotecar también su casa- ya está preparando la denuncia. «Lo único que espero ya es poder sacar a mis padres de este problema, y que me den lo mío para poder salir adelante», finaliza.