Quintás dimite como presidente de la patronal de las cajas de ahorro tras un tenso consejo

El Consejo de la Confederación Española de las Cajas de Ahorro ha terminado con polémica y una dimisión encima de la mesa, la de la su presidente, Juan Ramón Quintás. De la reunión, celebrada en Sevilla, tenía que haber salido el nombre del sustituto de Quintás, cuyo mandato termina dentro de seis semanas. Lejos del acuerdo, en el transcurso del debate uno de los presidentes ha expuesto que antes de elegir a un nuevo presidente había que contar con la dimisión del actual. Ha sido entonces cuando Quintás ha renunciado a su cargo.

Las discrepancias se han movido en torno a si el presidente de la CECA debería ser el dirigente de una gran caja o de una mediana. Tal ha sido la falta de acuerdo que los presentes han decidido posponer el debate hasta el próximo 20 de abril, cuando volverá a reunirse el consejo. Después ha llegado la dimisión de Quintás para impulsar el nombramiento de su sucesor.

Fainé, presidente interino

Para sustituir al actual presidente, que se jubilaba en mayo, hay varios 'finalistas', entre los que se encuentra el presidente de Ibercaja, Amado Franco (el candidato con, en principio, mayor consenso), el de Unicaja, Braulio Medel; el de Caja Murcia, Carlos Egea y el de Cajastur, Manuel Menéndez, si bien en los últimos días ha tomado fuerza la 'candidatura' del de La Caixa, Isidro Fainé, que ahora ocupa el cargo de forma interina.

En el actual escenario, con las tasas de morosidad subiendo y con restricción en la concesión de créditos debido a la crisis económica, presidir una caja con unas cuentas saneadas ha tenido un especial peso en el debate para sustituir a Quintás, que se jubila después de haber 'estirado' dos años su vida laboral -cumplió 65 años en 2008-. Quintás ha realizado consultas con los veintiséis miembros del Consejo de la CECA hace varios meses con el fin de comprobar si existían candidatos con suficientes apoyos para resultar elegidos.

En principio, Franco cumple todos los requisitos que hacen falta para poder presidir la CECA, según las normas no escritas que han estado en vigor hasta ahora y que prevén que los presidentes de esa patronal sean siempre presidentes o directores generales de una caja, como lo han sido todos excepto Quintás. En el proceso para designar al candidato más adecuado, contrastan los miembros de la CECA que consideran que debe proceder de una caja de las consideradas medianas, al entender que representa mejor los intereses de todo el sector, con los que proponen que para dialogar con el Gobierno en el escenario actual es necesario que el elegido sea el presidente de una gran caja para que tenga el respaldo suficiente en un agitado escenario de reestructuración de cajas.