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El parque de vehículos del Cuerpo es altamente deficitario, según denuncian los propios funcionarios. :: LA VOZ
Jerez

La Policía Nacional se echará a la calle el próximo día 22 para pedir más medios

Los sindicatos SUP y CEP convocan una concentración con la que exigirán más coches, personal y una nueva Comisaría; La Administración debía abonar el 65% de la reforma del barrio y afirman que ocho meses después aún no lo ha hecho

ALMUDENA DOÑA admontalvo@lavozdigital.es
JEREZ.Actualizado:

Se acabaron las palabras, las declaraciones de intenciones y las peticiones reiteradas que terminan en saco roto. Las condiciones en las que los agentes de la Policía Nacional de Jerez desarrollan su trabajo son tan deficientes que éstos han considerado que no les queda otra alternativa que manifestarse. Tras varias semanas madurando la decisión, finalmente serán dos de los tres sindicatos policiales (SUP y CEP) los que secundarán una concentración convocada para el próximo 22 de marzo a las puertas de la Comisaría.

Los motivos son de sobra conocidos, pues los funcionarios llevan años poniendo sobre la mesa una serie de problemas y carencias a los que no se da solución alguna. La situación, no obstante, terminó de volverse insostenible el pasado mes de febrero, como argumentan las dos organizaciones, ya que desde entonces cuatro de los cinco coches radiopatrullas con los que cuenta el Cuerpo permanecen averiados.

Como ya informó este medio, los profesionales están saliendo al paso de las dificultades con la utilización de una vieja furgoneta y un vehículo camuflado, si bien se trata de parches que en ningún caso ponen remedio al problema. «Estamos bajo mínimos desde el 2 de febrero -recuerdan fuentes del SUP- y la única explicación que tienen para todo es que no hay dinero».

«Siempre el dinero»

Este argumento es válido para la práctica totalidad de los déficits que padecen los agentes, empezando por las mismas dependencias policiales que tienen un sinfín de barreras arquitectónicas y unos cuartos antiquísimos y llenos de humedades y desconchones. Un estado que, sumado a los problemas de espacio que padecen algunas unidades, hace que el recinto se haya quedado obsoleto y que los funcionarios aboguen por la construcción de una nueva Comisaría.

Precisamente durante el último pleno municipal los grupos aprobaron por unanimidad una petición al Ministerio del Interior para que edifique unas nuevas dependencias acordes con las necesidades del personal. Ello demuestra que existe una sensibilización con el problema pero, a nivel local, el Ayuntamiento tiene las manos atadas pues la decisión ha de partir del Gobierno central.

Hay que destacar que en el año 2007 los tres sindicatos policiales lograron ponerse de acuerdo y secundaron una concentración que fue apoyada por CC OO y UGT, además de todos los partidos políticos de la oposición. Dos años más tarde, en 2009, se pusieron de acuerdo con la federación de asociaciones de vecinos, Solidaridad, con el fin de crear una plataforma ciudadana que reivindicara una nueva Comisaría.

A pesar de todos los esfuerzos, los funcionarios no lograron su objetivo y, en la actualidad, lo único que existe es la intención de levantar una comisaría conjunta que aglutine a ambos cuerpos aunque no hay un proyecto definitivo ni se contemplan plazos para ello.

Por otro lado, los policías hacen hincapié en otra de las demandas más antiguas y sobre la que no debería existir discusión, como es el cumplimiento del catálogo de puestos de trabajo. La plantilla actual asciende a 270 efectivos, mientras que el catálogo cifra la cantidad mínima en 301 teniendo en cuenta el volumen poblacional de la ciudad.

Ambos sindicatos insisten en la necesidad de que Jerez cuente con un número de profesionales de la seguridad acorde con las necesidades de la ciudadanía. Es más, apuntan a que harían falta incluso más agentes hasta llegar a un refuerzo de 80, aunque como ellos mismos reconocen todo empieza por conseguir que se ejecute lo mínimo, esto es, lo que plasma el catálogo.

A pesar de que no albergan muchas esperanzas de mejora, desde el SUP y la CEP lucharán por hacerse notar y recabarán todos los máximos apoyos posibles para su causa, que retomarán con una nueva movilización que amenaza con no ser la última.