El Madrid, de andar por casa

El Real Madrid no da más de sí en Europa. El multimillonario proyecto de Florentino Pérez sirve para andar por casa y pelear el título de Liga al Barça, pero no para aspirar a algo en la máxima competición continental, cuando estaba diseñado para ganarlo todo esta temporada y, sobre todo, para disputar la final de la Copa de Europa en el Bernabéu, donde el Barça amenaza ahora con levantar el título el 22 de mayo. Sería la mayor afrenta que podría sufrir el madridismo después del fracaso 'megagaláctico" ante el Olympique de Lyón. El Madrid está plagado de estrellas, pero no es un equipo, y el club continúa preso de la impaciencia. No da la talla en Europa después de haberse gastado más de 700 millones en las seis últimas temporadas, ya con nueve entrenadores en media docena de años.

El Barça, en cambio, no ha llegado a los 450 millones de inversión en fichajes para conquistar dos Copas de Europa y firmar un hito insuperable en la historia con sus seis títulos en una única temporada. En el caso del Manchester, se ha gastado 230 millones y ha llegado a ser campeón y subcampeón en las dos únicas ediciones..

La nueva eliminación continental ha destapado de nuevo las grietas del vestuario. Las críticas de Guti, justificadas aunque él no sea más indicado para dar lecciones de profesionalidad y de la necesidad de sacrificio por el bien del colectivo, han sido censuradas por Casillas y Sergio Ramos, y nadie puede entender que Kaká, aunque haya costado 65 millones, sea titular por decreto. Hasta Cristiano se queja del individualismo de sus compañeros. Ahora se vuelve a reclamar el despido de Manuel Pellegrini, pero aunque ganase el título liguero y por mucho que Valdano haya garantizado su continuidad, el chileno no seguirá la próxima temporada.

El problema es más de fondo, porque el Madrid todavía no sabe cuál es el perfil del técnico que quiere ni el modelo deportivo a seguir en un club en el que prima más el marketing que el fútbol. Se podrán lamentar los fallos de Higuaín, la ausencia del sancionado Xabi Alonso o la falta de reacción de Pellegrini en la segunda parte, pero la realidad es que el Madrid carece de consistencia, solidez, estilo y carácter para regresar a la élite europea. Y mientras, Robben, un extremo puro que ahora echa en falta el equipo, triunfando en el Bayern.

Casillas levanta el ánimo

No está el Madrid para fiestas. Estaba previsto que Cristiano compareciese ayer en el Bernabéu para presentar una bebida isotónica, pero tras el adiós europeo canceló el acto por «motivos familiares», en concreto, por la muerte de un primo suyo en accidente de tráfico. «Es uno de los momentos más tristes de mi vida. Algo que no olvidaré nunca», reconoció Ronaldo.

Después de un varapalo deportivo tan considerable, al menos fue una autoridad, Iker Casillas, el futbolista elegido para ofrecer rueda de prensa, y el portero madridista desveló que, aparte de que Pellegrini había recordado a sus jugadores «que hay una competición por delante que se avecina interesante en lucha con el Barça», que los futbolistas estuvieron hablando, «en persona» y «por teléfono», para levantar la moral. «Hemos intentado animarnos, sobre todo los jugadores que tenemos más peso en el vestuario a los jóvenes», aseguró el guardameta, que aseguró que Pellegrini tiene todo el apoyo de los jugadores.