El enigma de la desaparición de Anza
La familia denunció dos días después de que el etarra no acudiese a una cita con la banda terrorista en Toulusse
MADRID Actualizado: GuardarJon Anza Ortúñez, de 47 años, formó parte a principios de los ochenta de un comando de ETA denominado 'Lau Haizeta', por lo que cumplió una condena de 20 años de cárcel. Fue puesto en libertad el 2 de noviembre de 2002 y posteriormente trasladó su residencia a Francia. Su familia denunció en mayo de 2009 su desaparición, después de un mes sin noticias del etarra, que padecía una grave enfermedad.
La banda terrorista ETA informaba días después en un comunicado al diario Gara de la desaparición del militante de la banda terrorista y ex preso Jon Anza, quien debía haber acudido a una cita con los terroristas en Toulouse el 18 de abril de 2009, pero no llegó al lugar indicado. En este escrito, los terroristas señalaban que la Policía conocía la relación de Anza con ETA debido a que a principos de año descubrió material informático de la banda que éste tenía en un zulo y en el que habría encontrado sus huellas dactilares.
El comunicado de la banda terrorista aportaba nuevos datos sobre Jon Anza. Reconoce, en primer lugar, que Anza formaba parte de la organización terrorista y que el día en que desapareció tenía una cita con otros miembros de la banda en Toulouse para los que estaba haciendo un transporte de dinero. El etarra tomó el tren en Bayona con destino a Toulouse, pero no llegó a la cita con los otros etarras. Tampoco se presentó a dos citas de seguridad establecidas una para el mismo día 18 y otra para el día 19 de abril.
Casos similares
ETA señalaba también que no es la primera vez que ocurre esta situación en las últimas décadas y menciona las muertes de Joxi y Joxean, Anuk, Ttotto y Basajaun. "Ahora -añade el comunicado-, la desaparición de Jon nos lleva invariablemente a las desapariciones de Pertur, Naparra y Popo Larre". Además, en el escrito los terroristas apuntan a "detenciones extrajudiciales llevadas a cabo por guardias civiles y policías exigiendo colaboración e información" y destaca que esto ocurre con el visto bueno del Gobierno francés.
La banda terrorista responsabiliza a París de lo que hagan los policías españoles y señala que toda esta situación les lleva a concluir que tras la desaparición de Anza están, "como en los tiempos de los GAL, las fuerzas policiales españolas y el colaboracionismo francés", algo que define como "las cloacas de Francia y España".