Más control en la Eurozona
Actualizado: GuardarEl ministro alemán de Finanzas, Wolfang Schäuble, adelantó hace días a un periódico la idea de instaurar una especie de Fondo Monetario Europeo. Y ayer, se confirmaba que, en efecto, Alemania mantiene la idea, que coordinará sobre todo con Francia, de crear una institución encaminada no sólo a prestar ayuda a los países de la Eurozona que la precisen sino también a imponer una disciplina presupuestaria más estricta. El BCE se ha opuesto categóricamente a la idea, aunque con argumentos poco consistentes. La sujeción de los países de la moneda única al pacto de Estabilidad y Crecimiento, que limita el déficit público, es la base de la solvencia del euro. Pero conviene recordar que las primeras transgresiones, allá por 2005, provinieron precisamente de Francia y Alemania, y no fueron penalizadas. Aunque la idea del FME sea razonable, la buena salud de la Eurozona seguirá exigiendo que la política monetaria común que dicta el BCE con toda independencia tenga el referente de una hoy inexistente política económica común capaz de armonizar internamente el conjunto de los Veintisiete socios que forman la UE.