Gasol deja de ser talismán para los Lakers, que suman su tercer tropiezo consecutivo

Kobe Bryant lo repetía hasta la saciedad: «El último anillo es gracias a Pau». Phil Jackson siempre reconoció la trascendencia en el equipo del ala-pívot de Sant Boi. No eran palabras vacías. Desde que el español se vistió de púrpura y oro el 1 de febrero de 2008 los Lakers no habían perdido más de dos partidos seguidos. Hasta la pasada jornada. La derrota frente a los Magic (96-94) fue la primera vez desde la llegada de Pau en que los californianos encadenaban tres derrotas. Gasol dejó de ser talismán.

En el encuentro ante Orlando los Lakers se olvidaron del juego colectivo y se limitaron a las individualidades, con las que sólo brillaron las dos principales estrellas. Bryant fue el líder indiscutible con 34 puntos, pero el talento del estadounidense no fue suficiente para lograr el triunfo. El escolta echó de menos la colaboración de sus compañeros. Sólo el de Sant Boi volvió a rendir a su altura con un 'doble-doble', gracias a sus 20 puntos y 11 rebotes. Pero el resto del equipo permaneció inerte. Por su parte, el escolta Vince Carter fue el mejor de Orlando con sus 25 puntos. El poder bajo la canasta recayó en el pívot Dwight Howard, que barrió con 16 rebotes, además de 15 tantos. En los Magic hasta cinco jugadores acabaron con dobles dígitos.

Más derrotas

La jornada fue negra para los jugadores españoles. Toronto perdió 114-101 ante los Sixers con una discreta actuación de José Manuel Calderón. El base extremeño salió desde el banquillo para aportar ocho puntos y cinco asistencias en 24 minutos.

Además, Portland se estrelló con un gran Carmelo Anthony y cayó en Denver (118-106). El alero de los Nuggets fue el protagonista del choque con 30 puntos. Rudy Fernández aprovechó los 25 minutos que estuvo sobre la pista para anotar 14 puntos, capturar tres rebotes y repartir una asistencia.