La defensa de los Galán pedirá la reapertura de los clubes de alterne
Los abogados presentarán mañana un recurso contra el auto judicial para volver a abrir los negocios
CÁDIZ.Actualizado:Primero ganaron la batalla de la libertad y ahora luchan por la reapertura de sus locales. La suerte empieza a sonreírle a la familia Galán, propietaria de la red de clubes de alterne que fueron clausurados hace dos semanas por un presunto delito de explotación sexual y blanqueo de capitales. «Pues ni lo uno ni lo otro», insistió ayer José Luis Tellado, uno de los abogados de la defensa, que presentará mañana un recurso contra el auto que decreta la clausura de los negocios.
La decisión resulta llamativa porque la nueva jueza del caso decretó el pasado viernes la libertad sin fianza para todos los que permanecían en prisión, entre ellos el padre, Juan Galán y su hijo, Juan Pedro. La explicación que recoge en el auto es que ya no hay riesgo de destrucción de pruebas. Esa fue también la argumentación del fiscal, que mientras los establecimientos sigan precintados, asegura que «no podrán incurrir en una reiteración delictiva».
Pero el equipo de abogados del clan Galán va a intentar demostrar lo contrario y defenderán en el recurso que «no se han llevado a cabo actividades ilícitas porque los clubes actuaban como hoteles y no se lucraban de la prostitución ajena». También recalcaron que «en ningún momento se ha coaccionado a las mujeres para que la practiquen». José Luis Tellado se muestra optimista y dice que no dejará pasar más tiempo. «Tenemos tres días para presentarlo y quizá nos veamos obligados a formalizar una apelación ante la Audiencia Provincial si la jueza no retira las medidas cautelares», avanzó a este medio.
No es la primera vez que el letrado lleva a cabo un trámite similar. Ya tuvo que redactar un documento parecido hace ocho años por un proceso judicial contra el club Garum de Conil que fue clausurado durante una semana. «Aquello fue sobreseido y esperamos que en esta ocasión el resultado sea el mismo», aseguró.
Lo del presunto blanqueo de capitales es el otro delito al que se enfrentan los principales imputados. En este caso, Alberto Domínguez, que colabora en la defensa, consideró que, «dada la cantidad encontrada en la casa de Juan Galán -500.000 euros- no podría suponer un acto delictivo si se compara con el resto de la fortuna que maneja la familia, cifrada en más de 50 millones de euros».
«Lo peor ya ha pasado», consideró el letrado, que se mostró convencido de que «la cadena de hoteles club Galantería volverá a funcionar en breve». Aunque el proceso se prevé largo. Aún quedan por declarar más de 90 prostitutas, identificadas como clientas de estos establecimientos. Con los principales responsables de los prostíbulos en la calle, la presión mediática posiblemente se calmará, especialmente en lo que concierne a la prensa del corazón, que el pasado viernes hacía guardia a la puerta del penal de Puerto II.