Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
MUNDO

Vergüenza y desolación en el epicentro del seismo

Españoles residentes en Concepción censuran la oleada de saqueos en un país acostumbrado a los terremotos

CARMEN DE CARLOS
CONCEPCIÓN.Actualizado:

Jose Antonio de Diego es director del Centro Español de Concepción, epicentro del terremoto. Como Valentín Heredia, tesorero de la misma institución, llegó muy joven a Chile. Ambos forman parte de la última generación de emigrantes españoles en la ciudad, «aunque españoles españoles ya quedamos pocos», observan.

Según datos de la Embajada de España, en Chile hay 45.000 residentes españoles, de estos 1.500 viven en la región de Biobío que es junto con la de Maule la más devastada. Sólo en Concepción el Consulado tiene registrados 937 españoles pero, «la mayoría lo somos por nuestros padres», aclara Florencia Villanueva, hija del cónsul honorífico, Juan Villanueva. Su padre estaba de vacaciones en Buenos Aires cuando se produjo el terremoto. Eran las tres y media de la mañana y ella trasnochaba después de cenar en casa de unos amigos cuando comenzó a temblar la tierra. «Salí corriendo a la calle. Me fui a casa donde estaba mi hija de seis años. Por suerte la vivienda soportó bien los movimientos».

La misma solidez demostró el edificio de Valentín Heredia, de 67 años. El terremoto le sorprendió «durmiendo» con su mujer. «Nos quedamos abrazados en la cama hasta las siete de la mañana. No salimos ni echamos a correr. Vivimos en un quinto piso y pensamos; si se viene el departamento abajo nos pilla en la escaleras. La estructura aguanto todo».

Aunque no hay datos oficiales que confirmen un número de muertos españoles, los diplomáticos quieren hacer un seguimiento de los nacionales con la ayuda de los directivos del Centro Español.

José Antonio de Diego, de 71 años, es unos de los españoles más veteranos. Ha vivido tres terremotos en Chile pero ninguno con saqueos a posteriori. «Eso es lo peor. No se ha visto nunca. Lo horrible es el vandalismo en las farmacias y centros de salud. Eso no tiene nombre».