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Fernández se compromete a pagar la deuda y se echa encima a la oposición

Las declaraciones de la presidenta caen como un jarro de agua fría sobre los sectores disidentes dentro del peronismo

BUENOS AIRES Actualizado: Guardar
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La presidenta argentina, Cristina Fernández, ha lanzado un mensaje contundente a los mercados comprometiéndose al pago de la deuda con reservas monetarias pese al revés judicial sufrido por el Gobierno lo que ha irritado de nuevo a la oposición tras acusarla de intentos de "destitución" y "venganza".

Arropada por buena parte del Gabinete, Fernández defendió su política económica y cargó contra la oposición tras el golpe sufrido por el Gobierno por la decisión judicial de desautorizar el uso de reservas para el pago de la deuda, un nuevo obstáculo para el Ejecutivo que, el miércoles, perdió la mayoría en el Senado. "Las deudas que esta presidenta quiere pagar, y va a pagar, con las reservas del Banco Central, en el marco de lo que dice la Constitución y la carta orgánica del Banco Central, se encuentran depositadas en las cuentas de Economía (Ministerio de Economía)", explica la mandataria.

"Estamos ante intentos de destitución evidente por parte de algunos sectores", afirmó Fernández, convencida de que "nunca se dio tal avasallamiento" contra el Gobierno y de que la oposición mantiene una actitud de "venganza institucional" de "la más baja estofa".

Las deudas de otros

El nuevo conflicto político que vive Argentina estalló el pasado diciembre, cuando Fernández creó el llamado Fondo del Bicentenario, que incluía el uso de reservas para el pago de la deuda, una decisión contestada por la oposición, que desató una batalla política y judicial que terminó con la destitución del entonces presidente del Banco Central, Martín Redrado.

La presidenta nombró una nueva titular de la entidad monetaria, Mercedes Marcó del Pont, y derogó el decreto de creación del Fondo, aunque consiguió los 6.569 millones de dólares que precisaba para el pago de la deuda por un giro del Banco Central al Ministerio de Economía. Hoy, una jueza federal suspendió un decreto presidencial que el pasado lunes habilitó el uso de una parte de esos fondos, 4.382 millones de dólares, de las reservas monetarias para la cancelación de compromisos con tenedores privados este año.

"Se pretende que no paguemos lo que otros han contraído como deuda y se obstruye permanentemente a través de medidas judiciales. Lo que yo creo que es un abuso de poder porque quien tiene la responsabilidad de administrar las finanzas del país no son los jueces sino la presidenta", afirmó la mandataria. "Estoy dispuesta a enfrentar la condena de cualquier juez circunstancial, pero no a la condena de la Historia, que sería condenar a la Argentina, una vez más, al endeudamiento, al no pagar", insistió Fernández, que reiteró que "vamos a pagar, vamos a hacer honor a las deudas que otros contrajeron y recurren a jueces que parecen alquilados".

Críticas cruzadas con la oposición

La mandataria también criticó a la oposición, que este miércoles obtuvo el control del Senado argentino tras siete años de hegemonía oficialista y que también cuenta con mayoría en el Parlamento tras la derrota del oficialismo en las elecciones legislativas del pasado junio. Las declaraciones de la presidenta han caído como un jarro de agua fría sobre la oposición y sectores disidentes dentro del peronismo, que han coincidido en criticar el mensaje y acusar a Fernández de alimentar la crispación.

Para Elisa Carrió, de Coalición Cívica, tanto la presidenta como la titular del Banco Central incurren en una "situación penal irreversible y de juicio político" si desoyen la decisión judicial. También para Ricardo Gil Lavedra, de la Unión Cívica Radical, la presidenta ha demostrado que "no entiende que el Congreso es el único que puede decidir sobre el futuro de las reservas" y mantiene su pretensión de "gobernar sola, de ignorar a la justicia y al Congreso". El izquierdista Fernando "Pino" Solanas se mostró "sorprendido" por un discurso que "viene a encrespar más las aguas" y por su "grado de irracionalidad". A juicio del gobernador de Chubut, Mario das Neves, antiguo aliado del matrimonio presidencial y hoy distanciado del ex presidente y esposo de la actual mandataria, Néstor Kirchner, el mensaje "de confrontación y auto-referencial no es bueno, es un error. Acá se ha perdido la confianza", sentenció.

El Gobierno ahora debe recurrir la decisión judicial y estudiar si está dispuesto a afrontar el desgaste que supondría seguir adelante con sus intenciones de usar las reservas para el pago de la deuda con la oposición y la magistratura en contra.