«ESTÁ HECHO UN SINVERGÜENZA»

De todos los romances conocidos de Álvaro Muñoz Escassi, ninguno tan cercano al culebrón como el que vivió con Lara Dibildos. Cortaron al poco de comenzar, tras publicarse unas fotos en las que él besaba a otra en plena calle con nocturnidad (y tal vez alevosía). Sin embargo, el jinete logró salvar ese obstáculo dando un gran golpe de efecto. Se plantó en televisión y pidió públicamente perdón a Dibildos. Volvieron y culminaron la reconciliación con un embarazo, pero el arrepentimiento duró poco; menos que la gestación. Lo intentaron otra vez al nacer el niño, al que llamaron (si no quieres caldo...) también Álvaro, pero ya el bautizo del chiquillo demostró a las claras que aquello no tenía arreglo. La familia de él y la de ella celebraron la fiesta por separado.

Laura Valenzuela, la que pudo ser y no fue suegra de Escassi, podría escribir a buen seguro un libro, pero siempre ha mostrado una exquisita discreción a la hora de abordar el asunto. Sólo una vez, en una entrevista, tras deshacerse en elogios hacia su segundo nieto, un precioso bebé que nació ochomesino y que actualmente tiene tres años, declaró con fina ironía que «tiene cara de pillo» y que «está hecho un sinvergüenza», así como dejando flotar en el aire una pregunta más que evidente: ¿A quién demonios habrá salido?