Las obsesiones de Fellini
Una muestra en el Caixaforum de Barcelona expone las imágenes que inspiraron al creador de 'La dolce vita'
| BARCELONA.Actualizado:Las mujeres fueron su debilidad. Pasó su vida rodeado de ellas, ya fueran rostros angelicales, cuerpos exuberantes o prostitutas. Considerado uno de los artífices de la modernidad cinematográfica, el cineasta Federico Fellini (1920-1993), autor de 'La dolce vita', 'Amarcord' y '8 y medio' recibe un homenaje en forma de exposición en el Caixaforum de Barcelona. La muestra, 'Federico Fellini. El circo de las ilusiones', comisariada por Sam Stourdzé, podrá verse hasta el 13 de junio. Posteriormente viajará a Madrid. En ella se pone un énfasis especial en las obsesiones de Fellini, las imágenes que le inspiraron, las que soñó y las que construyó.
Así se detiene en aspectos inherentes al mundo felliniano, como la mujer en todo su polimorfismo, la ambigüedad de su sentimiento religioso, el psicoanálisis y su relación con los medios de comunicación. «La exposición nos ayuda a entender su imaginario. Su gusto por la cultura popular, su fascinación hacia las mujeres, su proceso de trabajo y también cuáles eran sus sueños y sus recuerdos de infancia, un tema muy recurrente en toda su filmografía», señala Montse Sánchez, coordinadora del certamen.
La muestra reúne una iconografía diversa, con más de 400 piezas, entre fotografías, dibujos, revistas, cómics, carteles, entrevistas y extractos de filmes, algunos de ellos inéditos hasta ahora. Todo con el doble objetivo de poner de relieve los mecanismos de la creación felliniana y explicar todo su cine a partir de una nueva mirada, abordando de una forma más amplia el siglo XX, el siglo del cine, de la prensa, de la televisión y de la publicidad: la fábrica de las imágenes, según sus organizadores.
Por ello, se articula en torno a cuatro grandes ámbitos, que presentan al maestro italiano a través de sus distintas obsesiones y sus fuentes de inspiración como materia prima de su proceso creativo. No se trata de una muestra estrictamente cronológica, ni filmográfica, sino que aborda de forma amplia los temas propios del siglo XX desde una óptica felliniana.
Extravagante
A los 19 años, Federico Fellini abandonó Rímini para partir a la conquista de Roma. Inició su carrera trabajando como caricaturista para diversos periódicos satíricos, pero no tardó en lanzarse a escribir. En la década de 1940 colaboró en la redacción de numerosos guiones de películas. Por ejemplo, trabajó junto a su amigo Roberto Rossellini en 'Roma, ciudad abierta' (1945) antes de debutar como director con 'Luces de variedades' (1950).
Algunos años más tarde lograría el reconocimiento internacional gracias al Oscar que obtuvo por 'La strada' (1954). A los cuarenta años, Fellini provocó una gran polémica con 'La dolce vita' (1960).
La Iglesia, que hasta entonces le había apoyado (considerándole incluso un cineasta católico), se indignó al estrenarse el filme, que tachó de decadente y blasfemo. Fellini continuó su carrera de forma totalmente libre, al margen de las tendencias. Alteró las reglas de la narración, deconstruyó el relato y reinterpretó el cine.
La película '8 y medio' (1963) supuso un nuevo giro: sus cuestionamientos sobre la creación y su reflexión sobre el cine le llevaron a superar las fronteras de lo real para explorar el mundo de lo imaginario. Los recuerdos de infancia, el inconsciente y los sueños empezaron a tomar relevancia en su obra.