PERDIDOS

Pilar Sánchez pierde peso en la agrupación local del PSOE. Era algo que se sospechaba desde hacía tiempo, pero que se puso de manifiesto en la reunión de la militancia local que tuvo lugar este pasado lunes. Porque una cosa es lo que se vende de puertas para fuera, lo que intenta publicitarse para tratar de no dañar la imagen del partido, y otra muy distinta es lo que ocurrió realmente. Y, sobre todo, cómo pasó.

La versión 'oficial' decía que la militancia socialista se reunió en asamblea para elegir la lista de 36 compromisarios que representarán a la agrupación local Ramón de Cala en el congreso provincial que se celebrará el 6 de marzo en Cádiz. La lista fue aprobada por el 92,06% de los 189 votos emitidos. La secretaria del PSOE de Jerez, Pilar Sánchez, destacó la importancia que tiene la celebración del congreso regional del partido, en la que está previsto que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, sea elegido nuevo secretario general de la formación en la comunidad en sustitución de Manuel Chaves. La lista elegida está encabezada por la propia Pilar Sánchez, seguida por el consejero Antonio Fernández, la diputada nacional Mamen Sánchez, y los concejales Juan Manuel García Bermúdez, Margarida Ledo, Casto Sánchez y Dolores Barroso. También figuran los delegados municipales Juan Pedro Crisol, Juan Salguero e Irene Canca. A muchos llamó también la atención que se incluyese un miembro de Izquierda Socialista de Jerez, que se caracteriza por su posición crítica con el actual gobierno del Ayuntamiento.

Lo nombres evidencian que figuran miembros tanto de una facción del PSOE local como de la otra. Porque a estas alturas todo el mundo sabe ya que en el seno del partido existe desde hace tiempo una confrontación de pareceres irreconciliables. Están los oficialistas y, como en la magnífica serie de televisión 'Perdidos', Los Otros. Los que están a muerte con Pilar Sánchez y los que no la pueden ver ni en pintura. Los que están y los que acechan, aunque sin saber muy bien quién es el que está y quién el que acecha. Y aquí es donde entra la otra versión, la 'no oficial', ésa que no interesa que se conozca, o al menos que no trascienda tanto, para no dañar la imagen del partido.

Evidentemente, la lista que se sometió a la votación de los militantes fue previamente pactada entre las partes. Y la negociación correspondiente no fue lo que se dice fácil. Todo lo contrario. Fue una pugna en la que tanto uno como otra trataron de imponer su criterio y, así, situar a su equipo como el vencedor de cara a los demás. Un pulso, en definitiva, para demotrar quién es más fuerte. ¿El resultado? Pues según cómo se mire y, sobre todo, según quién lo interprete. Podría hablarse de un empate, de un reparto de poder, de una lista, en consecuencia, en la que existe prácticamente la misma representación de los unos y de los otros. Cuentan que Pilar Sánchez no quería aceptar muchos de los nombres que finalmente han entrado, pero que tuvo que tragar. No le quedó otra. La conclusión, por tanto, es la que se apuntaba al inicio del texto: la alcaldesa está perdiendo peso en su partido. La cuestión es saber si lo recuperará. Hay quien apuesta que sí.