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Ricky, en la imagen junto a Lishchuv, fue clave en el triunfo 'culé'. :: EFE
Deportes/Baloncesto

La conexión Ricky-Vázquez relanza al principal favorito

Con el base y el pívot realmente imparables para el Valencia, el Barça logra su clasificación para su quinta final de Copa en la última década

AMADOR GÓMEZ
BILBAO.Actualizado:

La conexión Ricky Rubio-Fran Vázquez volvió a funcionar para relanzar al gran favorito a conquistar la Copa en Bilbao. Con el base y el pívot imparables para el Valencia, el Barça se clasificó para su quinta final en las 10 últimas ediciones de un torneo que parece estar destinado a los azulgranas. Tiene tanto y tan bueno para elegir este Barcelona que no es necesario que brille como equipo, que funcionen todas sus figuras, que acierte con su tiro exterior, ni que se desfonde para aspirar con fundamentos a los títulos y confirmar que es el mejor equipo del continente. Regula, y pega el estirón definitivo cuando cree preciso, de la mano de sus 'cracks', para acabar con cualquier atisbo de duda. Esta vez no fue el desaparecido Navarro, sino una pareja brutal con la que el Barça ha dado el salto de calidad necesario para reinar, al menos en todas las competiciones nacionales. La segunda, ya a un paso, puede ser la Copa tras la conquista de la Supercopa que ganó al Madrid.

El espectacular rendimiento de Ricky y Fran fue suficiente para desarbolar al Power Electronics, que soñaba con que sonase por segunda vez la flauta como ocurrió en la Liga ACB con aquel triple mortal de Rafa Martínez a siete décimas del final. El Barça no permitió llegar a una situación a vida o muerte. Cuando el Valencia se puso arriba mediado el tercer cuarto, volvió a la pista Fran Vázquez, Ricky comenzó a disfrutar tras haberse perdido el segundo periodo por dos tempraneras personales y el Barcelona puso tierra de por medio. La defensa azulgrana resurgió y el Barça dio el golpe de autoridad necesario para acabar con un Power Electronics que, gracias a Rafa Martínez anuló a Navarro, pero al que le resultó imposible frenar en la zona al pívot gallego y en toda la cancha al espectacular Ricky. Ambos se despidieron con 19 puntos de valoración y el Barça, pese a sus lagunas y el bache de algunos de sus mejores hombres, con una mayor sensación de poderío.

Problemas tras el descanso

Los principales inconveientes blaugranas llegaron tras el descanso. Tardó en mejorar el Barcelona por esa fase del encuentro y el Valencia llegó a ponerse arriba por segunda vez (44-43) desde un anecdótico 4-3 inicial. Fue su máxima diferencia. Un único punto. Cuando el Barça lo vio mal pisó el acelerador y dio un puñetazo en la mesa. Cuando el Valencia había logrado empatar, fue Ricky el que tomó la iniciativa para decidir. Y cuando el Valencia mantenía su mínima diferencia en el ecuador del tercer periodo, Fran volvió a la cancha para poner otra vez orden y crecer en la pintura.

El Barça no bajó el pistón en el último periodo del encuentro y ello le permitió aumentar su ventaja. De 11 (51-62), sellada con un triple del propio Ricky Rubio, el segundo que logró el base que dio cuatro asistencias, lo que permitió que Fran Vázquez se tomase un merecido descanso y se ganase la esperada ovación del público. De momento, no hay quien le pare por dentro.