Piden 100.000 euros al Consistorio por un incidente en el botellódromo

Las graves lesiones que sufrió Adrián Iglesias hace poco más de un año pueden costarle alrededor de 100.000 euros al Ayuntamiento de Jerez, puesto que la acusación particular le solicitará una indemnización como responsable civil subsidiario. El motivo es que el altercado en el que el joven perdió un ojo tuvo lugar en el botellódromo, un espacio público que «debería haber ofrecido» todas las medidas de seguridad necesarias para evitar incidentes como éste.

Según la ley de reciente aprobación, los municipios que habilitan un espacio determinado para consumir alcohol en la calle deben «garantizar el normal desenvolvimiento de la convivencia ciudadana», argumento por el que la acusación particular, ejercida por el letrado Ángel Durán, solicitará esta responsabilidad. La cantidad que se pide es aproximada, según las valoraciones de los informes forenses, y no será hasta las conclusiones del juicio, con todas las razones sobre la mesa, cuando se concrete la cifra definitiva que se le pedirá al Consistorio jerezano como responsable civil subsidiario.

Cuatro jóvenes son los acusados por el suceso, calificado de un presunto delito de lesiones con resultado grave (delito 149 del actual Código Penal), que serán juzgados desde hoy en la Sección Octava de la Audiencia Provincial. En la sesión prevista para esta mañana comparecerán los implicados directos además de 18 testigos presenciales, con la intención de los letrados de que aporten algo de luz a un grave suceso que se desarrolló en apenas unos treinta segundos y de noche. Dada la magnitud del incidente y la cantidad de declarantes citados, la vista se retomará la mañana del lunes, fecha en la que comparecerán, entre otros, los forenses, varios agentes de policía, el propio jefe de la Policía Local de Jerez, Manuel Cabrales, y el que fuera entonces delegado municipal de Seguridad y Movilidad, Juan Manuel García Bermúdez.

11 años

Tanto la acusación particular como la Fiscalía solicitan penas de 11 años de cárcel para los cuatro acusados: M. F. O. M, J. M. R. C, E.F. R. y S. M. B. El primero de ellos es el considerado autor material de los hechos y es el único que permanece en prisión, aunque la condena solicitada por el suceso es la misma para los cuatro.

Además de la solicitud de privación de libertad, el abogado de la víctima pedirá una orden de alejamiento de los acusados para que no se aproximen a menos de 300 metros de la víctima durante los próximos diez años. El letrado considera que se produjo también un abuso de superioridad ya que supuestamente el ataque estuvo protagonizado por cuatro personas contra una sola.

Con una botella

La noche del 25 de octubre de 2008 la víctima salió con unos amigos con los que acudió al botellódromo, situado en el parque González Hontoria. Al parecer, el incidente se produjo a raíz de que Iglesias, que tenía entonces 21 años, escupió cerca del lugar donde uno de los acusados tenía aparcado su coche por lo que comenzó una discusión que acabó pasando a las manos. Tras recibir varias patadas y un golpe en la cabeza, uno de los procesados, presuntamente, incrustó una botella en la cara del joven lo que provocó la pérdida de un ojo.