Los alumnos de la Escuela Adscrita se manifestarán por la subida de las tasas

Los estudiantes de la Escuela Adscrita de Relaciones Laborales, Trabajo Social y Turismo aprobaron ayer en asamblea convocar una manifestación para el próximo miércoles, 24 de febrero, en protesta por la constante subida de tasas universitarias y la necesidad de mejoras en las instalaciones.

El delegado de alumnos del centro, José Carlos Haro, explicó ayer que los 171 euros que costaba la mensualidad en el curso 2008/09 han pasado este curso a 198 euros. «Como el resto de los estudiantes de la Universidad de Cádiz, aparte pagamos la nuestra matrícula. También abonamos 13 euros mensuales más por cada asignatura que suspendemos aunque no podamos ir a las clases porque se pisan con las asignaturas del siguiente año», dijo José Carlos Haro. Este suplemento por asignatura suspendida ha aumentado en dos euros con respecto al curso pasado.

«Todo esto estaría bien si la facultad estuviera en buenas condiciones pero no es así: hay importantes goteras, ordenadores que no funcionan y las instalaciones deportivas tienen agujeros. Además, la calefacción no funciona en todas las clases», detalló ayer el representante de los alumnos. Haro explicó que los estudiantes han celebrado ya dos asambleas y que hasta ahora han decido esperar a que el patronato de la escuela adscrita se reuniera para analizar sus consideraciones pero «estamos esperando esta reunión desde noviembre», contó.

Sin respuesta

Antes de pasar a las movilizaciones, los alumnos le han enviado una carta al patronato pero la respuesta se demora ya más de dos meses. Entre sus peticiones, destaca la solicitud de que las tasas vuelvan a los precios del curso 2008/2009 o «en todo caso, que suban lo establecido por el IPC en este tiempo». Solicitan también la devolución a los estudiantes de la diferencia entre las tasas pagadas hasta la fecha y el nuevo precio establecido -que sería igual al del curso pasado- así como el acceso de los estudiantes al informe económico de la institución, incluidos los presupuestos para el actual ejercicio.

Además de pedir un arreglo de las deficiencias de las instalaciones, los estudiantes recordaron que la escuela adscrita -con domicilio en la avenida León de Carranza- no tiene cafetería y los precios de la copistería son mucho más elevados que en cualquier otra universidad. Entre las tres carreras que se imparten, la escuela tiene alrededor de 450 alumnos.