Un escándalo sexual sacude los cimientos del Gobierno palestino

El escándalo de corrupción y sexo en la Autoridad Nacional Palestina (ANP) aireado la pasada semana por un ex agente de Inteligencia al servicio de la Muqata ya se ha cobrado su primera víctima: Rafik Huseini. El presidente palestino, Mahmud Abbas, suspendió ayer al que ha sido su histórico consejero y jefe de Gabinete tras la difusión de un comprometido vídeo en el que Husseini aparecía desnudo y metiéndose en una cama, presumiblemente dispuesto a acostarse con una mujer que le había pedido trabajo.

Rafik Huseini ha caído en desgracia, al menos durante las próximas tres semanas. Ése es el plazo que Mahmud Abbas ha dado a una comisión creada también ayer para que investigue los entresijos de la grabación y, más allá, las graves denuncias realizadas por el agente Fahmi Sabanah relativas al presunto desvío de dinero de la caja de la ANP a los bolsillos de algunos jefes de la organización.

La reacción de Abbas, no obstante, está muy lejos de apaciguar los ánimos del delator, que, entre revelaciones y rencores, dejó muy claro que sacaría a la luz documentos que harán temblar la Muqata si no se cumple su deseo de ver a Husseini -y otros sospechosos cuya identidad no ha revelado- totalmente apartados de sus funciones.

En este sentido, Sabanah lamentaba que la comisión investigadora ya ha arrancado mal, puesto que en sus filas se cuenta Azzam al-Ahmad, que según el ex agente está también involucrado en la corrupción. «Malversó junto con su hermano dos millones de dólares (casi 1,5 millones de euros) en la compra de unos terrenos», advertía el denunciante desde su casa de Jerusalén Este, donde cumple arresto domiciliario.