Los contrastes de la competición

El segundo club más rico del mundo contra el más pobre de la Primera División. Un presupuesto de 420 millones de euros frente a otro de sólo nueve. Un gigante que ha conquistado 31 títulos de Liga, es el más laureado de Europa y esta temporada está obligado a ganar algo, ante un novato en la elite que es el colista de la máxima categoría y camina de nuevo hacia Segunda. El Xerez-Real Madrid representa los enormes contrastes entre ambos equipos, y los blancos se presentan en territorio abonado, aunque el césped de Chapín esté en malas condiciones, y con la lección aprendida del desastre de la Copa ante el Alcorcón. Contra una víctima propicia, disponen de la oportunidad de acercarse a sólo dos puntos del líder, con la esperanza de que el Barça pinche el domingo en el Calderón. Además, vuelve Cristiano, un gigante entre los modestos jugadores del Xerez, al tiempo que Casillas cumple su partido 500 con el Real Madrid.

Les separan 39 puntos, y 14 victorias y 38 goles a favor del Madrid (lleva marcados 50, frente a sólo 12 del Xerez). bien es cierto que los blancos llegan sin Guti -otra vez lesionado, esta vez en el tobillo- y a Benzema, la sola presencia de Cristiano e Higuaín en ataque provoca pavor en Xerez. Pese a su ilusión y las proclamas lanzadas desde el equipo azulino, sorprender al Madrid sería una gesta para el humilde Xerez. Su ventaja es que no tiene nada que perder. El Madrid, sí. Amenazado por alejarse más de la lucha por el título y por emborronar una impresionante trayectoria reflejada en los resultados, más que en el juego. Casualmente, los madridistas han jugado sus dos mejores partidos de la temporada fuera de su estadio sin Cristiano, en Mestalla y Riazor, pero el 'crack' portugués regresa ahora ansioso por vengarse de lo que considera una injusticia, aunque se ganase dos encuentros de sanción por su codazo en la cara a Mtiliga.

Posible relajación

Sabedor de que Cristiano es imprescindible y aporta un plus de calidad y pegada en este Madrid, más que del rendimiento del luso, la mayor preocupación del chileno Manuel Pellegrini es que sus futbolistas se puedan relajar y se reserven para el inmediato choque europeo.

«La prioridad es el Xerez. Después,ya le tocará el turno al Olympique de Lyon», ha insistido el propio Pellegrini a sus jugadores, que ven en esta jornada la oportunidad de meter presión al Barça, confiados en que el Atlético se podrá aprovechar el día después de las numerosas bajas del Barça en la zona defensiva y les podrá echar una mano. Para los futbolistas blancos, aunque Pellegrini opine lo contrario, el fin de semana es el ideal para dar el golpe. Ahora que el Madrid ha dado también un salto fuera del Bernabéu, la ocasión no puede ser más propicia ante un rival que en el banquillo tendrá a quien como jugador fue pupilo de Pellegrini en el Universidad Católica de Chile, Néstor Gorosito.

A expensas de la actitud del Madrid en Chapín, nadie puede pensar en que el alumno derrote al maestro y que el pequeño obligue al grande a arrodillarse. Ya lo consiguió el Alcorcón. Dos veces parece poco probable.