Los grupos de élite no cuajan
La medida, que debía haberse aplicado en tres órganos saturados, sólo alcanzó a uno, donde apenas ha durado un mes El refuerzo de los juzgados ha contado con escaso respaldo de los funcionarios
CÁDIZ. Actualizado: GuardarFueron llamados los «grupos de élite» y estaban llamados a descongestinar al menos 20 juzgados de toda Andalucía, de los cuáles, tres estaban en la provincia de Cádiz: el de primera instancia e instrucción número 2 de Barbate, el mixto número 2 de San Roque y el número 4 de Chiclana, tres de los órganos con más retraso en la tramitación de los asuntos, debido a una situación insostenible.
Había que tomar una medida de urgencia. Así que la Junta anunció a finales de septiembre que reforzaría la plantilla de estos tres órganos judiciales durante los siguientes meses, al menos hasta enero, enviando a ellos estos 'grupos de élite' formados por cuatro funcionarios cada uno. No sería cualquier funcionario, sino los mejores (de ahí el nombre): personal con experiencia, elegidos por su trayectoria y cualificación, que se trasladarían temporalmente desde otros juzgados de la provincia con menos nivel de saturación.
Tres meses después de su puesta en marcha, los grupos de élite han sido suspendidos por la Consejería de Justicia con un resultado irregular. «En realidad no pueden suprimirse porque nunca se pusieron en marcha», critican en este sentido los representantes sindicales, que consideran la medida como insuficiente y «fracasada». En Cádiz, por ejemplo, se esperaba que 12 funcionarios formasen estos equipos, pero sólo se adhirieron dos personas (la participación no era impuesta sino voluntaria). «Sólo se creó medio equipo, que fue suprimido a finales de diciembre, después trabajar un mes en el juzgado número 4 de Chiclana», explica Pedro Moral, responsable de Justicia de UGT en Cádiz, que recuerda que desde un comienzo la propuesta no tuvo una buena acogida entre los funcionarios. Entre otras razones porque, al mantener sus plazas en los juzgados de origen, muchos trabajadores temían encontrar trabajo acumulado al regreso, a pesar de que la Consejería garantizó que las plazas no quedarían vacantes.
El refuerzo formaba parte de un paquete de medidas de urgencias que fue bautizado como 'Plan de Respuesta Razonable', y que contemplaba otras propuestas que buscaban el desatasco judicial, como la apertura de ciertos juzgados por las tardes, tres días a la semana, para sacar adelante un mayor número de asuntos. Se aplicó sólo en los juzgados de lo social, de lo mercantil y de lo penal, ya que son los que más problemas poseen actualmente. Frente a la fría acogida de los 'grupos de élite', el trabajo por las tardes recibió una respuesta de los trabajadores que rebasó las expectativas de la Junta, en gran parte gracias a la buena bonificación de las horas extras, que según adelantó LA VOZ, se cobraban a 25 ó 30 euros.
La medida tenía el mes de enero como fecha límite (el pasado día 12), cuando la Delegación evaluaría viabilidad. Los sindicatos ven «probable» que el Plan de Tardes cuente con una segunda fase, aunque en órdenes distintos. El resultado de esta iniciativa, sin embargo, ha sido «irregular» según fuentes judiciales, que recuerdan que en ciertos juzgados el colapso es permanente y los tres meses de refuerzo han sido insuficientes, ya que no va acompañado de un refuerzo de jueces.