
El robo en la Caja y la reducción de ingresos impiden nuevas inversiones
Los planes de ayuda estatales y regionales han suplido la falta de unos presupuestos que coordinen actuaciones de mejora en la ciudad
Actualizado: GuardarUna tarea casi imposible es para el Ayuntamiento la necesidad de ajustar las cuentas para la creación de unos presupuestos. Aunque lo contable siempre parece muy complicado en este caso se puede explicar de manera sencilla. Si al robo de la Caja municipal, que son 7,8 millones de euros, se le suma la reducción de ingresos a consecuencia de la crisis y de unas previsiones hinchadas, el resultado es que el Consistorio apenas tiene dinero para afrontar el día a día. Como consecuencia no se pueden elaborar unos presupuestos que permitan acometer las actuaciones más necesarias para la ciudad y sin presupuestos no hay partidas con las que continuar con los planes de mejora acordados con las asociaciones de vecinos. En resumen, no entra dinero para cuadrar las cuentas y por lo tanto no hay dinero para cumplir con las promesas realizadas a las entidades.
Los planes estatales y regionales han salvado por el momento la posibilidad de realizar reformas que eran incuestionables como el arreglo del alcantarillado en la zona de Buen Pastor. Pero los agujeros a tapar son cada vez más grandes y esto significa que de las próximas ayudas que vengan, parte del dinero se tendrá que quitar de la puesta en valor de las barriadas para sanear el Ayuntamiento. Tanto es así que el equipo de Gobierno local ya ha solicitado que un 20% de lo que traiga el nuevo plan para el impulso de la economía local se destine a gastos comunes generados por el Consistorio.
Desde la oposición se tiene claro que la razón de que la gestión municipal dependa de unos presupuestos prorrogados es porque estas circunstancias adversas obligarían a modificar a la baja las previsiones.