PARO SOLIDARIO
Dice Antonio Fernández que el desempleo sube porque cada parado inscribe a su familia en el SAE
Actualizado:Quien tiene la amabilidad de seguirme estas líneas cada domingo, sabe que me pirro por los temas locales. Soy consciente de que, para hablar sobre política nacional o internacional, terrorismo, economía de grandes cifras u otros temas de notable envergadura, este periódico cuenta con notables firmas, cuyos nombres evitaré, por ser de sobra conocidos.
Sin embargo hoy, sin abandonar lo local, pues al fin y al cabo es de un jerezano de quien quiero hablarles, me van a permitir que me adentre en las entrañas del paro y ello, para comentar someramente las espectaculares declaraciones que nuestro paisano, a la sazón Consejero de Empleo, Antonio Fernández, realizó esta semana en una reunión celebrada con la Confederación Granadina de Empresarios. Por si el tema les ha pasado desapercibido, dijo Fernández -y transcribo textualmente- que: «hay un fenómeno que estamos viviendo en las oficinas (del INEM), que por cada persona que pierde el empleo se generan tres inscripciones más, el efecto, en fin, solidaridad o efecto familia. Por ejemplo, cuando un hombre del sector de la construcción pierde el empleo, la respuesta en casa es 'vamos a ir todos' y apuntan también a la mujer y el hijo si es mayor de edad. Y ese fenómeno está ocurriendo».
Qué, ¿se les queda el cuerpo a cuadros? No negarán que al menos la teoría es novedosa. El Consejero ha establecido las bases de algo que podríamos denominar «mimetismo familiar en cuanto al desempleo». Vamos, que si mi hermano es despedido de la bodega en la que trabaja (supongo que aunque no sea del sector de la construcción, la teoría igualmente es válida para el sector bodeguero), inmediatamente mi cuñada, mis sobrinos mayores de edad, e incluso este propio cronista, marcharemos apresurados a engrosar las listas del paro, por aquello de que la solidaridad nos empuja a aliarnos con quienes sufren. Así mi hermano no se sentirá sólo en ese terrible trance que siempre supone pasar a engrosar las fatídicas listas de los sin trabajo.
Desde tal teoría oficial -nunca olviden que proviene del máximo responsable del empleo (y del paro) en nuestra Comunidad-, de los casi 40.000 parados que tiene Jerez, más de 25.000 serían familiares solidarios. Del millón de andaluces que no tienen empleo (el 29,4% de la población activa, más de nueve puntos por encima de la media nacional), al final va a resultar que realmente parados están poco más de 300.000. El resto, y lo dice el Consejero, son esposas e hijos mayores de edad.
Me van a permitir el comentario, pues creo que tales declaraciones han sido formuladas de todo corazón y, para ello el Consejero, no ha tenido más que fijarse en el Ayuntamiento de Jerez. Si en nuestro Consistorio cuando la Alcaldesa salió elegida, fue solidaria e inmediatamente dio empleo a familia y allegados, desde su propio marido hasta la peluquera de confianza, ¿por qué no va a existir idéntica solidaridad en el mundo de los parados? Al fin y al cabo si nos unimos en la alegría del cargo público y todos a trabajar por la patilla, bueno será que nos unamos también en la desgracia del que queda desempleado y, aunque sólo sea por aumentar los datos del paro y demostrar lo mal que se gestiona el tema del empleo en nuestro país, todos a apuntarnos al INEM.
Si nuestros ínclitos gobernantes andaluces tuviesen la amabilidad de que, las próximas elecciones al parlamento andaluz no coincidieran con las elecciones nacionales, igual teníamos la oportunidad de hablar sólo sobre Andalucía y, en ese debate, el consejero, con tranquilidad, podría explicar tan curiosa teoría. El problema es que fomentar la picaresca, o achacar el paro a los propios parados y sus familias, igual se les vuelve en contra, nos cabrea, e incluso logra que los mandemos a probar como se encuentra uno entre las listas del INEM. Algo que si ocurriera, estén seguros que sería muy beneficioso para una cosa llamada la regeneración democrática.