Los técnicos municipales demandan a la alcaldesa por presunta prevaricación
JEREZ. Actualizado: GuardarLa Agrupación de Técnicos Municipales de Jerez (ATMJ) presentó el viernes la querella que tenían preparada contra la alcaldesa, Pilar Sánchez.
El motivo, señalan en un comunicado, «es la presunta comisión de un delito por parte de la alcaldesa al haber dictado varias resoluciones por las que se cesaban y modificaban las retribuciones de once compañeros técnicos del Ayuntamiento». Decisiones que se llevaron a cabo, según estos mandos intermedios, «apoyándose en argumentos y hechos que se demostrarán falsos».
Así que «tras seis meses esperando a que Pilar Sánchez o la delegada de Recursos, Ainhoa Gil, accedieran a acercar posturas con los afectados, la callada ha sido la única respuesta obtenida».
Esta querella es la última de las actuaciones que tanto la Agrupación de Técnicos Municipales como los once afectados han emprendido para «requerir amparo judicial ante una acción de la alcaldesa que prescinde de los requisitos legales necesarios y que usa la falsedad para justificarla».
«Consideramos que las resoluciones de cese firmadas por la alcaldesa son absoluta y manifiestamente injustas y arbitrarias, y lo son de una forma burda, grosera y fácilmente demostrable», recalcan.
Acuerdo de pleno
Al mismo tiempo se considera que con las resoluciones, Pilar Sánchez ha contravenido «de forma flagrante» el acuerdo del pleno del Ayuntamiento de Jerez de 27 de diciembre de 2007, que estableció la integración del personal de la Gerencia Municipal de Urbanismo y de otros organismos autónomos en el Ayuntamiento. Ya que, según este acuerdo, «el personal se debía integrar sin que se modificaran sus derechos y obligaciones hasta tanto no entrara en vigor la tantas veces vendida Relación de Puestos de Trabajo (RPT)».
En definitiva, «la alcaldesa se ha extralimitado en sus competencias hasta el punto de actuar en contra de un acuerdo del pleno de la corporación». Con lo que «llegados a este punto, no se entiende salvo como una persecución torticera y obsesiva hacia técnicos municipales carentes de ascendente político alguno y que son mandos intermedios que tienen varios niveles jerárquicos por encima».