Con la mirada puesta en el bolsillo
MADRID. Actualizado: Guardar«Aún quedan muchos meses para las elecciones municipales y autonómicas que se celebrarán el 29 de mayo de 2011; en todo este tiempo, nuestro principal objetivo y nuestra máxima preocupación, debe ser seguir trabajando con firmeza, eficacia y compromiso para afrontar la crisis y sus consecuencias». Es una de las frases recogidas en la resolución que ayer aprobó el Comité Federal del PSOE, los 'nobles' del partido. Una de esas frases con trampa. La dirección socialista pretende que aún no hay por qué inquietarse ante los malos augurios electorales, pero el mero hecho de que se vea obligada a subrayarlo ante los suyos y, aún más, a ratificarlo en su principal cónclave entre congresos, desmiente la aparente tranquilidad.
Es cierto que en política los tiempos cuentan de otra manera. Pero también lo es que la crisis económica ha demostrado tener sobre las perspectivas del partido gubernamental un efecto devastador que ni los escándalos de corrupción que salpican al PP, ni las disputas internas, ni los cuestionamientos a la autoridad de Mariano Rajoy han provocado en las expectativas del primer partido de la oposición. En las filas populares también hay, pese a todo, preocupación por lo que puedan desvelar los dos tercios del sumario del 'caso Gürtel' que aún están bajo secreto de sumario, aunque el propio Mariano Rajoy considera que la investigación judicial ya no afectará a más dirigentes populares y que abundará en acusaciones con respecto a los ya imputados.
Los hombres de José Luis Rodríguez Zapatero esperan que la mejora de la situación económica, en el último trimestre del año, dé a sus barones cierto vuelo. La realidad, de momento, no acompaña. Pese al moderado optimismo mostrado por el presidente del Gobierno en sus recientes discursos, este viernes salieron a la luz dos datos preocupantes. El primero: la destrucción de puestos de trabajo continúa, España tiene ya 4,3 millones de parados (un nuevo récord histórico) y no se descarta que la tasa de desempleo llegue a lo largo del año al 20%. Y el segundo: déficit público superó en 2009 lo anunciado y se disparó al 11,4%.