Hillary Clinton pierde un zapato en la escalinata del Elíseo en su cita de ayer con Sarkozy. :: REUTERS
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La Fiscalía recurre la absolución de Villepin por el complot contra Sarkozy

El ex primer ministro denuncia que se trata de «una decisión política» fruto del «ensañamiento y el odio» del presidente francés

PARÍS. Actualizado: Guardar
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El culebrón Clearstream tendrá nuevos y apasionantes episodios. La Fiscalía, dependiente del Gobierno francés, recurrió ayer la sentencia que la víspera había absuelto al ex primer ministro Dominique de Villepin de conspirar contra el presidente, Nicolas Sarkozy. El inocente provisional denunció una «decisión política» fruto del «ensañamiento y el odio» de su rival doméstico. El juicio en segunda instancia, previsto en vísperas de las presidenciales de 2012, promete.

«El tribunal no ha sacado todas las consecuencias y todavía falta que emerja una parte de la verdad», declaró ayer el fiscal jefe de París, Jean-Claude Marin, para justificar la decisión de recurrir. Según sus cálculos, el juicio ante el Tribunal de Apelación se celebrará a finales de 2010 o comienzos de 2011. Acompañarán a Villepin en el banquillo el informático Imad Lahoud y el ex vicepresidente de EADS Jean-Louis Gergorin, que han recurrido por su parte las penas a dieciocho y quince meses a las que fueron condenados, respectivamente, como principales autores de las listas falsificadas de supuestos titulares de cuentas con dinero negro en el extranjero.

Quien no estará representado esta vez será Nicolas Sarkozy, cuyos apellidos de origen húngaro fueron añadidos al listado fraudulento de evasores fiscales. El jefe del Estado ha renunciado a personarse de nuevo como parte civil, un papel que le había acarreado críticas de ser juez y parte, pues es presidente del Consejo Superior de la Magistratura y está blindado penalmente por la inmunidad de su alta función.

Denuncia calumniosa

Desde el estricto punto de vista jurídico, el recurso fiscal entra dentro de la lógica. Caso insólito, Marin había acudido al juicio en el Tribunal Correccional de París para reclamar en persona la condena de Villepin por complicidad en denuncia calumniosa. «Poncio Pilatos no puede quedar impune», clamó entonces desde el estrado por considerarlo culpable de «abstención voluntaria». Es decir, que dejó desarrollarse la conspiración con pleno conocimiento de causa, tesis que rechaza la sentencia.

Pero desde la perspectiva política a nadie se le escapa la dependencia jerárquica de la Fiscalía del Ministerio de Justicia y, por ende, de la jefatura del Estado, aunque Jean-Claude Marin negó actuar por instrucciones escritas del Elíseo. Pero Villepin denunció de inmediato «una decisión de naturaleza política que muestra que un hombre, Nicolas Sarkozy, el presidente de la República, prefiere perseverar en su ensañamiento y en su odio antes que asumir la responsabilidad de su función, es decir, defender las instituciones».

Sin precisar si se presentará a las presidenciales de 2012 contra el presidente Sarkozy, el ex primer ministro no tuvo tapujos en trasladar el desafío al terreno de la contienda intestina. «Cuando en la cumbre del Estado el ejemplo brilla por su ausencia, hace falta que otros hombres y otras mujeres lleven el peso del poder» advirtió con redoble de tambores de guerra. Continuará...