Irán ejecuta por primera vez a dos detenidos en las protestas contra el régimen
Actualizado:Mohamed Reza al-Zamani y Arash Rahmanipour han sido los dos últimos iraníes ahorcados por el régimen de Teherán. No se trata de dos ejecuciones más de las alrededor de trescientas anuales que acomete la república islámica, según denunció ayer Amnistía Internacional. El organismo considera que fueron los primeros ajusticiados de entre los cientos de detenidos por las protestas postelectorales que mantienen al país sumido en una crisis desde el 12 de junio.
El tribunal revolucionario persa, por contra, vincula a los detenidos con la Asociación Monárquica de Irán, movimiento de la oposición acusado de estar detrás del atentado contra una mezquita de Shiraz, que costó la vida a trece personas en 2008 y que también respaldaría la oleada de manifestaciones contra el régimen de los ayatolás de los últimos siete meses.
Los abogados defensores, por su parte, denunciaron graves irregularidades en todo el proceso y el letrado de Al-Zamani aseguró incluso que su cliente se vio obligado a declararse culpable después de que varios miembros de su familia recibieran amenazas.
Bajo la acusación de 'moharebeh' (enemigos de Dios) y tras un mes de calma tensa en las calles después de que el 27 de diciembre al menos ocho manifestantes murieran en los enfrentamientos con las fuerzas del orden durante las protestas en la celebración de Ashura -principal festividad religiosa chií-, estos ahorcamientos son interpretados por los medios de la oposición como un aviso de cara al 11 de febrero, cuando se celebrará el vigesimoprimer aniversario de la revolución islámica.
Como ha ocurrido desde la polémica victoria en las urnas de Mahmud Ahmadineyad y siguiendo el mismo tipo de protesta con el que triunfó la propia revolución contra el sha en 1979, los opositores aprovechan las jornadas festivas para echarse a las calles en oposición al régimen.