Viqueira no se plantea salir

Emilio Viqueira quiere retirarse en el Xerez. El centrocampista gallego, que apura su último año de contrato en las filas azulinas, pendiente de cumplir 24 partidos para renovar de manera automática, reconocía ayer en rueda de prensa que le han llegado ofertas de equipos de Segunda División a través de su representante, aunque aclaró que no se iba a «ir de este club ahora» después de todo lo que había pasado y estando ahora en Primera División. «Sí que es verdad que a mi representante le han llegado cosas, pero yo tengo claro que he pasado mucho tiempo en este club y me ha dado para pasarme diez meses sin cobrar, conocer a muchos piratas y hasta he vendido entradas». De hecho, Viqueira desveló que su «ilusión» es retirarse «en el Xerez si es posible, que la gente me dé un aplauso y me recuerden como buen futbolista y buena persona. La decisión la tengo que tomar yo y estoy muy involucrado en el equipo. Soy uno de los capitanes y tengo que dar ejemplo. Quiero colgar las botas en el Xerez».

Viqueira se quiere quedar y el Deportivo no ha accedido a la oferta formal que le presentó días atrás el Castellón. Según publica ‘Las Provincias’, la operación tampoco ha llegado a buen puerto porque el Xerez no ha caído en la trampa que le intentaron tender los responsables del club ‘orellut’. Los hombres de José Laparra pretendían abonar sólo la cuarta parte de la ficha de Viqueira hasta el 30 de junio. El 75 por ciento restante querían que corriese a cuenta del equipo azulino. El Xerez ha dicho no. Lo contrario hubiera sido una sorpresa mayúscula.

El Castellón se puso en contacto tanto con el representante de Viqueira, José Rodríguez, ‘Rodri’, y con el club jerezano para transmitirles la intención de hacerse con sus servicios. La predisposición del jugador a vestir la camiseta albinegra, teniendo en cuenta su posición en la tabla, no era esperanzadora. El agente del jugador también estaba abierto a la negociación. Sólo faltaba que el Xerez estuviera por la labor de dejar salir al futbolista y que el argentino Néstor Gorosito, nuevo entrenador xerecista, no pusiera ninguna traba. El Xerez accedió a dejarle salir en calidad de cedido, pese a que Viqueira finaliza contrato, siempre y cuando el Castellón se hiciera cargo de la totalidad de la ficha que le queda por cobrar, es decir, seis meses. En este punto chocaron frontalmente ambos clubes. El Castellón no está dispuesto a pagar más del 25 por ciento de la ficha del jugador y quería que el Xerez se encargase de abonarle a Viqueira el 75 por ciento restante.

Castellón

La cuestión no es baladí porque Emilio José Viqueira cobra entre 300.00 y 400.000 euros por temporada, lo que quiere decir que al futbolista todavía le queda por recibir cerca de 200.000 €, tope salarial en el Castellón de una ficha por temporada. El cuadro valenciano sólo está dispuesto a pagar 50.000 euros por un jugador que estaría seis meses en el club. El Xerez se niega en redondo a esa oferta por lo que las posibilidades de que el futbolista gallego acabe jugando en la entidad albinegra son prácticamente nulas.

Además, el centrocampista del Deportivo reconoce que «a lo largo de todo este tiempo han llamado muchas veces a mi representante, pero yo volví a Jerez cuando estábamos en Segunda y a ocho puntos de salir de los puestos de descenso. Todo el mundo me llamaba loco y no tiene sentido que digan que puedo salir. Puede ser que le pregunten al representante porque gracias a Dios han llegado muchas cosas, pero mi ilusión es retirarme en el Xerez, que la gente me dé un aplauso y que me despidan como un buen futbolista, como una buena persona o como tenga que ser».

Todos estos ofrecimientos han surgido porque Viqueira no está teniendo demasiados minutos en la presente campaña, algo que al gallego no le hace tirar la toalla porque dice encontrarse «bien», aunque lleva «muchos meses sin jugar un partido». «Es más», Emilio añade que «han pasado casi tres meses en los que no he jugado más de veinte minutos. Se nota cuando no juegas, pero yo creo que tengo fútbol, que puedo seguir un año más y quiero retirarme en el Xerez si puedo. Si no se dan las circunstancias, habrá que buscarse las habichuelas, que tengo tres niños que comen mucho».