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La Ertzaintza desarticula el primer comando de ETA en más de seis años
El Gobierno de Euskadi garantiza que la Policía vasca «trabajará sin descanso» para «ver el final de la banda lo antes posible»
BILBAO. Actualizado: GuardarLa Ertzaintza desarticuló ayer el primer comando de ETA en más de seis años y asestó el primer golpe de peso a la banda terrorista desde que se conformó el Gobierno vasco presidido por Patxi López en mayo pasado. El Ejecutivo socialista de Euskadi aprovechó la exitosa redada para renovar uno de sus compromisos de legislatura, la implicación total de la Policía autónoma vasca en la lucha contra ETA. El mensaje lo lanzaron al unísono el consejero de Interior, Rodolfo Ares, y la portavoz del Ejecutivo de Vitoria, Idoia Mendia: la Ertzaintza «trabajará sin descanso» para «acabar con el terrorismo en todos sus frentes» y «ver el final de la banda lo antes posible».
Agentes de la Ertzaintza, coordinados desde la División Antiterrorista, arrestaron el lunes en tres poblaciones costeras de la zona limítrofe ente Vizcaya y Guipúzcoa a cinco miembros 'legales' de ETA (no fichados), a quienes Ares vinculó de forma directa con la voladura en 2008 de la comisaría de la policía vasca en Ondarroa y con atentados contra las obras del tren de alta velocidad y un repetidor de televisión.
La última desarticulación por la Policía vasca de un comando etarra se produjo en septiembre de 2003, cuando capturó a los cinco principales integrantes del 'comando Vizcaya' y localizó en Galdakano un depósito con 150 kilos de explosivos y armamento variado. Dos días antes de las pasadas elecciones vascas, el 1 de marzo de 2009, agentes de la Ertzaintza arrestaron a Manex Castro, uno de los integrantes del comando que posiblemente asesinó al ex concejal socialista Isaías Carrasco y al empresario Inaxio Uría, pero el resto de los componentes lograron huir a Francia.
El consejero de Interior, nada más acceder al cargo, anunció que la División Antiterrorista actuaría en breve contra ETA y rompería la imagen de pasividad que acompañó a este cuerpo durante los anteriores gobiernos nacionalistas de Juan José Ibarretxe. Cumplió su deseo a las cuatro de la madrugada de ayer, cuando sus agentes, bajo la dirección del magistrado Eloy Velasco, de la Audiencia Nacional, desencadenaron la redada y detuvieron a tres sospechosos, el presunto núcleo del 'talde', en la localidad vizcaína de Ondarroa, y a dos colaboradores del grupo en las poblaciones guipuzcoanas de Deba y Mutriku.
El comando de 'legales' estaba liderado por Ibón Iparraguirre Burgoa, de 36 años, que fue arrestado en el municipio vizcaíno junto a Asier Badiola Lasarte, 29 años, y Xeber Uribe Beitia, de 32, sus hombres de confianza. En Deba y Mutriku fueron detenidos Jon Iñaki Esnaola Alba, de 34 años, y Javier Zubizarreta Legardi, de 40.
La Ertzaintza realizó ocho registros en viviendas y locales de las tres poblaciones y se incautó de documentación y material informático. El hallazgo más interesante se realizó en una vivienda vinculada a Iparraguirre, donde los agentes encontraron una pistola, material para la elaboración de bombas-lapa y otros componentes. Las detenciones elevan a nueve los presuntos etarras capturados en enero.
El consejero, rodeado por la cúpula del departamento, confirmó que el grupo desarticulado prestaba apoyo a otros comandos mayores de ETA, de los que pudo quedar desenganchado hace meses, para las acciones de importancia y se reservaba para sí atentados menores.
Su mayor actividad se registró en 2008. El 21 de septiembre participaron «con toda claridad», algunos como «colaboradores necesarios» y otros como «presuntos autores», en el ataque con coche-bomba a la comisaría de la Ertzaintza de Ondárroa. El comando lanzó un cóctel molotov junto a la puerta para atraer la atención de los agentes y, cuando salieron, hizo estallar una bomba de 100 kilos que destruyó por completo la comisaría y dañó numerosas viviendas, pero que, milagrosamente, sólo provocó heridas a 15 personas, seis de ellos, policías.
Ares atribuyó al mismo comando la voladura de un repetidor de televisión en Azpeitia (Guipúzcoa), ocurrida el 30 de marzo, y un ataque con explosivos, en julio, contra maquinaria de las obras del tren de alta velocidad en Orio (Guipúzcoa). El consejero indicó que, por el momento, no hay datos que confirmen la participación de los sospechosos en los atentados de Santoña (Cantabria), donde ETA asesinó al brigada Luis Conde, y contra una sucursal de Caja Vital, en Vitoria, donde estalló un segundo coche-bomba.